En enero del 2009 trascendió en la prensa de España que el Real Madrid buscaba fichar un extremo derecho y la opción que manejaba era la del ecuatoriano Antonio Valencia.

El tricolor en aquel entonces se encontraba en el Wigan y en junio pasó al Manchester United donde escribió las páginas de oro de su historia.

Los merengues se inclinaron por el francés, hoy con 39 años, sin embargo, fue poca su estadía en el club ibérico.

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“Probablemente sea el mayor fiasco de la historia de los fichajes de invierno. El Madrid quería un extremo derecho que pudiera jugar en la Champions y se fijaron en (Antonio) Valencia”, señaló diario AS.

“Ante la imposibilidad de firmar al ecuatoriano, el Madrid cerró la cesión de Faubert a última hora. Jugó sólo 78 minutos y en la memoria de la afición queda la imagen del jugador echándose una siesta en el banquillo con el partido en juego”, agregó el rotativo español. (D)