Amonestaciones deportivas y multas fueron lo que advirtió la FIFA para los jugadores que usen los brazaletes arcoíris OneLove durante el Mundial de Qatar 2022. La campaña que intenta “expresar su apoyo a la unificación de todas las personas” y combatir la discriminación en la cancha fue prohibida en el segundo día de la competencia por la institución deportiva, junto a cualquier otro tipo de declaración política en los uniformes de los equipos.

La FIFA se ha visto involucrada en polémica por la elección de la sede del Mundial, en un país restrictivo con los derechos humanos y que rechaza a la comunidad LGBTQ.

“He hablado de este tema con las más altas autoridades del país. Han confirmado, y yo puedo confirmar, que todos son bienvenidos. Si alguien dice lo contrario, esa no es la opinión del país y desde luego tampoco de la FIFA”, manifestó previamente Gianni Infantino, presidente del organismo.

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La FIFA asegura que la finalidad del reglamento de Qatar 2022, “aprobado por todos los agentes involucrados en el fútbol, es preservar la integridad dentro del terreno de juego de todos los participantes, y resulta aplicable por igual a todas las selecciones que compiten en el torneo”.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, durante la rueda de prensa ofrecida en vísperas del partido inaugural de la Copa del Mundo de Qatar 2022. EFE/José Méndez Foto: José Méndez

El anuncio de FIFA hace alusión al artículo 13.8.1 del reglamento de equipamiento, que establece: “Para las competiciones finales de la FIFA, el capitán de cada equipo debe llevar el brazalete de capitán proporcionado por la FIFA”.

La organización adelantará la campaña No Discrimination, prevista incialmente para los cuartos de final. Consiste en un brazalete negro que sustituye al de arcoíris y trata de ser una muestra de apoyo.

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Harry Kane, capitán inglés, usa el brazalete No Discrimination en el partido Inglaterra-Irán.

“La FIFA es una organización inclusiva que quiere poner el fútbol al servicio de la sociedad apoyando las buenas causas y las causas legítimas, si bien eso debe hacerse en el marco del reglamento de la competición, que es conocido por todos”, apunta el máximo organismo mundial.

La Asociación Holandesa de Fútbol, KNVB, aseguró sentirse “profundamente decepcionada” por la postura de la FIFA, ante la prohibición de la campaña OneLove. “Esto va completamente en contra del espíritu de nuestro deporte, que une a millones de personas”, dijo la organización en un comunicado.

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“Junto con otros países implicados, analizaremos críticamente nuestra relación con la FIFA”, añadió.

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Los capitanes de las selecciones de Inglaterra, Gales, Bélgica, Países Bajos, Suiza, Alemania y Dinamarca retiraron su decisión de usar los brazaletes tras la amenaza de la FIFA. Aunque estaban dispuestas “a pagar las multas que normalmente se aplican a las infracciones de la normativa sobre el equipamiento”, declararon “inaceptable” que existan amonestaciones deportivas.

“No se quiere que el capitán empiece el partido con una tarjeta amarilla. Por eso, con mucho dolor, como grupo de trabajo de la UEFA... y como equipo, hemos tenido que decidir abandonar nuestro plan”, dijo la federación holandesa. Según la selección, la FIFA dejó claro que su capitán Virgil van Dijk recibiría una tarjeta amarilla si salía a la cancha con el brazalete.

“Como federaciones nacionales, no podemos poner a nuestros jugadores en una posición en la que puedan enfrentarse a sanciones deportivas, incluidas las amonestaciones, así que hemos pedido a los capitanes que no intenten llevar los brazaletes en los partidos de la Copa Mundial de la FIFA”, expresó un comunicado conjunto de las selecciones.

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(I)