Los mensajes que intercambiaban el núcleo duro de la anterior junta directiva del FC Barcelona, la que presidía Josep Maria Bartomeu, desvelan la afilada animadversión que la cúpula del club sentía hacia Lionel Messi y Gerard Piqué. Se emplean insultos gruesos y se reprochan supuestos chantajes, en particular del astro argentino. Messi y Piqué eran claramente los más detestados. Así lo refleja un informe de El Periódico de Catalunya.

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En estos chats de WhatsApp hablaba con particular inquina Román Gómez Ponti, entonces máximo responsable de los servicios jurídicos del Barça, de cuyos dispositivos surgen las capturas de pantalla de los Mossos d’Esquadra. En algunas de estas conversaciones intervenían también Bartomeu, Òscar Grau, el que era CEO del club, directivos como Jordi Moix, Oriol Tomàs y David Bellver, el director financiero Pancho Schroder y Javier Sobrino, director de Estrategia e Innovación.

Cuando salieron a la luz los contratos, el cruce de mensajes entre directivos y altos ejecutivos del club, con el director Òscar Grau incluido en la conversación, es una mezcla de búsqueda de culpables e insultos a los jugadores.

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El único que mantiene la calma y que censura sin ambages la situación es el presidente Josep Maria Bartomeu, que afirma “Óscar (a Óscar Grau), esta filtración solo puede salir del club. No creo que sea una filtración de él para provocar su marcha. Quien lo ha filtrado hace daño al club”. Y añade que las cifras que se han publicado del contrato de Messi “en tiempos sin pandemia eran totalmente asumibles”.

Pero lo más llamativo es el tono que emplea el jefe de los servicios jurídicos, Román Gómez Ponti para referirse a Messi. “Barto, de verdad, no se puede ser tan buena persona con esta rata de cloaca. El club le ha dado todo y él se ha dedicado a marcar una dictadura de fichajes, traspasos, renovaciones, patros (patrocinadores) solo para él, etc. Yo no podré hacerlo nunca pero a las cifras de su contrato habría que sumar Pinto, la renovación de (Luis) Suárez, y la de Jordi Alba, o la comisión de renovación de Fati (Rodrigo Messi, agente? Pero si no sabe ni leer y encima llevaba de socio a un traficante de drogas). Y sobre todo el cúmulo de chantajes y desplantes que el club y los que trabajamos hemos sufrido de esta enano hormonado que le debe al Barça la vida... ah! Pero cuando vienen mal dadas (pandemia) recibes el mítico whatsapp: ‘presi, bájales el sueldo a los demás, pero a mí y a Luis no nos toques’. Ojalá marche entre la indiferencia de la gente, que es lo peor que le puede pasar (un pesetero más)”.

A esta diatriba, Òscar Grau responde un lacónico “sí” mientras que Bartomeu insiste en que “estoy de acuerdo en muchas cosas, pero primero el Barça y este tipo de artículos dañan la imagen del club”.

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Para completar los dichos descalificatorios, Ponti añade que “a las cifras de su contrato deberían sumarse Pinto, la renovación de Luis Suárez y la de Jordi Alba. O la comisión de renovación de Fati (Rodrigo Messi ¿agente? Pero si no sabe ni leer y encima lleva de socio a un traficante de drogas)”.

Este hilo que comparte El Periódico de Catalunya muestra que luego de la goleada al FC Barcelona del Bayern Munich: el humillante 8-2 en cuartos de final de la Champions League, el 14 de agosto de 2020 en Lisboa, Gómez Ponti se ensaña con Gerard Piqué. Por el exdefensa haber dicho que hacía falta cambios en todos los estamentos del club, el entonces máximo responsable de los servicios jurídicos del Barça señala: “Hace falta tener pocos escrúpulos y ser un grandísimo hipo de puta”.

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Sergio Busquets también recibe los golpes de Gómez Ponti en esta misiva en la que aconseja a Bartomeu el despido “de aquellos jugadores que no tienen mercado y no pueden ser traspasados (Busquets puede ser un ejemplo excelente) para despedirlos con una indemnización mínima y olvidarnos que han pasado por el club por insolidarios”.

(D)