Aunque la Federación Ecuatoriana de Fútbol no ha dado ningún nombre para reemplazar a Gustavo Alfaro desde antes de la desvinculación oficial del entrenador de la Tricolor, desde dentro del país y también desde el exterior se han promocionado a posibles candidatos para ocupar el cargo que dejó vacante el argentino. Entre esos probables aspirantes se promovió insistentemente a Miguel Ángel Ramírez, conocedor del medio nacional.

Que con Independiente del Valle ganó la Copa Sudamericana en el 2019, que conoce el fútbol de Ecuador, que sabe cómo jugar en la altura y otros datos se expusieron a favor de Ramírez, de 38 años. Pero el DT viene de dar dos malos pasos seguidos en Brasil y Estados Unidos, sitios en los que fracasó.

El español fue anunciado como nuevo entrenador del Sporting de Gijón, ya dirigió su primera práctica y fue presentado ante la prensa que cubre los movimientos del equipo.

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Durante sus declaraciones, el exentrenador de los de Sangolquí, mencionó que tuvo propuestas (no mencionó a los interesados), pero que las descartó porque no llenaban sus expectativas.

“Estoy muy feliz de estar aquí hoy. Todo ha sido muy rápido, siento muchas emociones. Nunca imaginé poder estar en un Club tan grande como el Sporting”, aseguró.

“Llevaba meses descartando cosas porque entendía que no cazaban lo que realmente estaba buscando y he aprendido, por la últimas experiencias, donde quería estar y en qué tipo de proyecto quería trabajar”, añadió el estratega.

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Al ser consultado sobre las razones por las que eligió al Sporting de Gijón, Ramírez justificó la decisión que tomó.

“El fútbol base (formativas) ha sido algo que ha marcado mi interés y hay un grupo detrás que ha demostrado con otros clubes, en otro país, que ha focalizado su atención y energía en una visión y han sido coherentes con esto”, manifestó.

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“Seguramente donde más éxito he tenido ha sido en algo muy similar que es un proyecto con una visión muy clara”, concluyó Ramírez. (D)