Animado por una multitud, que a cambio recibió solo halagos de parte de Ronaldino, el campeón del mundo con Brasil en 2002 se presentó este miércoles en un centro comercial de Quito para compartir con un grupo de aficionados que gozaron de la presencia del astro brasileño.

Ronaldinho cerró su agenda de actividades de tres días en la capital ecuatoriana con asistencia a un mini torneo de fútbol tenis junto a un grupo de aficionados, ganadores de diversas dinámicas planteadas por la casa de pronósticos Betcris, de la que el brasileño es su embajador internacional.

El óvalo central del centro comercial El Condado fue el escenario que acogió a Ronaldinho y un espectáculo deportivo que contó con la animación del mundialista ecuatoriano Álex Darío Aguinaga, representante local de la marca.

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Con una camiseta azul y celeste listada, un pañuelo en la cabeza y gafas oscuras, Dinho saltó “al campo de juego” para la segunda parte del denominado Ronaldinho Challenge, una trivia para los ocho concursantes finalistas, que demostraron sus habilidades con el balón y un amplio conocimiento de la vida del múltiple campeón con clubes y la selección de Brasil.

Al caluroso recibimiento de la gente, Ronaldinho respondió con múltiples halagos y sonrisas, además de llevarse el recuerdo en imágenes del ambiente y el público presente en el centro comercial.

El brasileño dijo estar “agradecido” por la acogida del público capitalino. “Siempre es un placer estar aquí, me he sentido muy bien aquí, la gente es muy cariñosa. Cada que vengo acá soy bien recibido, con mucho cariño”, dijo el brasileño, que fuera de competiciones oficiales es la segunda ocasión que visita Ecuador, la anterior fue como figura de la Noche Amarilla, en la presentación de la plantilla de Barcelona SC en 2016.

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“Hay chicos acá que nunca me vieron jugar, pero que por internet conocen de mi trayectoria, eso es una gran alegría, el saber que todo lo que he hecho en el fútbol les gusta”, apuntó.

Los resultados del concurso quedaron solo para un registro, todos los participantes gozaron de la presencia del brasileño, con quien posaron al cierre del evento para fotografías, mientras otros aprovecharon para extender balones y camisetas que fueron grabadas con la rúbrica del ganador del Balón de Oro en 2055. (D)