El escalador australiano Michael Storer (equipo DSM) ganó en solitario la etapa 7 de la Vuelta a España este viernes en el alto del Balcón de Alicante, mientras que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma), sorprendido por un grupo de unos cincuenta corredores que se escapó a cien kilómetros de meta, tuvo que emplearse a fondo para mantener su maillot rojo de líder por unos segundos. En tanto, el ecuatoriano Richard Carapaz (Ineos Grenadiers) subió dos puestos.

En una notable etapa marcada por el abandono del español Alejandro Valverde (Movistar), víctima de una dura caída, Storer logró la primera gran victoria de etapa de su carrera, demostrando ser más fuerte que sus compañeros de fuga finales: el español Carlos Verona (Movistar, 2.º este viernes) y el ruso Pavel Sivakov (Ineos Grenadiers, 3.º).

Roglic se vio sorprendido por una enorme fuga formada en el Port de Benilloba a un centenar de kilómetros de meta.

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Pero a rueda del británico Adam Yates (Ineos) en la parte final de la etapa, el bicampeón de la Vuelta pudo conservar su liderato en la general por solo 8 segundos con respecto al austriaco Felix Grossschartner (Bora-Hansgrohe), que terminó 7.º en este viernes a 1 minuto y 32 segundos de Storer.

Valverde, campeón del mundo en 2018 y vencedor de la Vuelta 2009, se cayó en una curva a una cuarentena de kilómetros para meta, cuando acababa de lanzar un ataque en compañía del tricolor Carapaz para escaparse del grupo del líder en el descenso del Port de Collao (2.ª categoría).

La Locomotora del Carchi cruzó 26.º la meta a +4 min 3 s del vencedor. Sus compatriotas Jefferson Cepeda y Jhonatan Narváez llegaron juntos, 60.º y 61.º, respectivamente, con +11 min 48 s. Jonathan Caicedo fue 106.º (+26:29).

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Sábado para esprínteres mejor ubicado en la carrera. Está 16.º a +2 min 48 s de Roglic, does puestos más arriba que la etapa previa pero con 30 segundos perdidos respecto del esloveno.

Sábado para esprínters

La prueba del sábado es una etapa complemente llana entre Santa Pola (Alicante) y la Manga del Mar Menor (Murcia) con 173,7 de recorrido en principio abocada a terminar en esprint.

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Lo único que podría evitarlo sería la aparición del viento o que llegase la fuga del día, aunque no es previsible, porque habrá al menos tres equipos especialmente interesados en una llegada masiva, el Alpecin de Jaspr Philipsen, el Deceuninck-Quick Step de Fabio Jakobsen y el Groupama de Arnaud Demare.

Philipsen está siendo el dominador de las volatas ganando en Gamonal y Albacete, Jakobsen le dio réplica en Molina de Aragón y Demare es el más obligado tras meterse hasta ahora con opciones solo en el esprint en Molina de Aragón, donde fue segundo.

La Manga del Mar Menor es un destino asiduo y proclive para los sprints en la Vuelta, en la que acumula tres llegadas y cuatro salidas. De ellas la salida de la carrera en 1980.

El director deportivo de La Vuelta, Fernando Escartín, asume que la del sábado apunta a la “cuarta y última llegada al esprint de la primera semana”. “Aunque también alerta que “es una zona de mucho viento que puede complicar la jornada”. Pero como “en los meses de verano tiende a soplar menos”, barrunta un “día de control para los equipos de aquellos velocistas que quieran pelear por la victoria en una nueva llegada masiva”. (D)

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