Su madre, Diana de Gales, es aún un motivo que une a los príncipes Guillermo y Enrique. Son pocas las veces en que ambos se refieren a cómo era su madre o cómo les afectó su muerte, mucho menos emiten comentarios polémicos sobre algo relacionado a ella, se indica en una publicación del sitio web 20 minutos.

Pero el estreno de la cuarta temporada de la serie 'The Crown' ha puesto los reflectores sobre Carlos de Inglaterra y Lady Di, quien falleció hace más de dos décadas pero para muchos aún hay mucho por decir sobre ella.

En las redes sociales no faltan los comentarios, que incluyen incluso los rumores de que su fantasma recorre el palacio de Buckingham, pero también la propia corona se ha referido a Diana de Gales.

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Su hijo mayor, Guillermo, se ha manifestado sobre una polémica reciente, que surge porque según la cadena ITV, un periodista de su competencia directa, la BBC, coaccionó a la princesa para que concediese una entrevista al programa Panorama en 1995.

Un documental por los 25 años de aquella mítica charla (fueron 23 millones de británicos mirando el televisor) ha hecho presumir esa posibilidad de coacción para explicar cómo pudo criticar tan abiertamente la institución monárquica o decir frases como: "Éramos tres en este matrimonio. Estaba un poco superpoblado".

Con esto dinamitó la opinión pública, dando a entender que le fue infiel con Camilla Parker Bowles así como ella misma había tenido igualmente otras relaciones fuera del matrimonio.

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El hermano de Diana de Gales, Charles Spencer, indica en el reportaje que todo fue planificado por Martin Bashir, el periodista que hizo la entrevista, quien aseguró a la princesa que estaba siendo investigada por los servicios secretos británicos y la Casa Real, enseñándole una serie de facturas del supuesto espionaje que hicieron que, a sus 34 años, dos antes de su muerte, temiera por su vida y concediese la entrevista.

Pero todo se agravó aún más cuando la cadena BBC desmintió una parte de aquello, pero no todo: no negaba la existencia de los documentos falsificados, aunque sí que estos fueran determinantes para la decisión de dar la entrevista por parte de Lady Di, dado que los vio después de aceptar (y al parecer por ello emitió una respuestas tan reveladoras).

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El asunto ha llegado a tal punto que la BBC ha iniciado una investigación interna y han emitido una disculpas públicas, lo que ha sido tomado como algo superficial. La nueva y rápida reacción de la cadena sí que ha sido elogiada: ha puesto el caso en manos de una investigación independiente que llevará a cabo un juez ya retirado.

Investigaciones en marcha

Esta acción de la BBC ha sido bien vista por los hijos de Diana de Gales y Guillermo se ha manifestado sobre esto: "La investigación independiente es un paso más en la dirección correcta. Debería ayudar a esclarecer la verdad detrás de las acciones que llevaron a aquella entrevista en (el programa) Panorama y las posteriores decisiones que tomaron los ejecutivos de la BBC en ese momento".

Enrique, quien resultó muy afectado por la muerte de su madre, se siente a gusto con la idea, aunque es Guillermo quien está al tanto de cómo avanza la investigación, debido a que se ha llegado a decir que le dolió tanto aquella entrevista que, como en su adolescencia era bastante irascible, atacó a su madre acusándola de traidora.

Actualmente, Martin Bashir tiene 57 años y es el encargado del Área de Religión de la BBC y el principal sospechoso de que todo sucediera, apuntando hacia él todas las líneas de investigación. El problema, según la cadena, es que debido a una reciente operación de corazón y a que ha estado realmente grave debido al coronavirus, por ahora, no se puede contactar con él.

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Sin embargo, hay fotografías que muestran a Bashir haciendo vida normal, por lo que se cree que su enfermedad no es motivo que le impida colaborar con la investigación. Un colega suyo de la época Nicholas Witchell ha manifestado que pueden contar con él para dar su testimonio.

Y no es algo menor que él testifique, debido a que en un inicio él iba a realizar la entrevista, pero por problemas de agenda que le hicieron trasladarse, tuvo que cederle el espacio a Bashir, quien cambió sus preguntas a otras más polémicas (y, según dicte la investigación, se sabrá si coaccionó o no a la princesa para que las respondiese). (I)