Una Andreína Bravo relajada y risueña se presentó en el set de En Contacto, en donde fue entrevistada por Henry Bustamante y Dora West. La ecuatoriana recién llegada de Turquía respondió con absoluta tranquilidad cada interrogante planteada en vivo.

Bravo fue parte del reality internacional El poder del amor, que se transmite todos los días en Ecuavisa. De este lugar fue eliminada por votaciones de sus compañeros. “Apenas salí, como insisto, mi madre me llamó... mis padres son mi todo”, dijo la también cantante, quien indicó que su mamá es su mánager.

Su salida trajo algunos comentarios en contra del también participante Don Day, a quien algunos en redes sociales tildaron de judas por haber preferido a Amor Carlin que a su compatriota. Con respecto a esto, la joven aseguró ya haber hablado con él. “Él me dijo que se dejó llevar por malos comentarios, yo pienso que de María Emilia (Cevallos), siempre he dicho uno no tiene que dejarse llevar por las personas, uno tiene que conocer...”, refirió Bravo.

Publicidad

A la vez, afirmó que sí esperó que entre ecuatorianos se mostraran apoyo. “A mí sí me afectó porque yo abogué por él (Don Day) desde el día uno, porque mi objetivo era compatriotas, apoyo entre países, porque no es Mare, no es Don Day, es Ecuador, y como tú te proyectas es como ven al país (...) cuando vi que lo querían atacar porque de lo poco que conozco a Don Day no creo que sea machista, entonces abogué por él... creí que se iba a acercar, pero en el programa hay mucha presión y yo no culpo a nadie, ni señalo, sino que es de valientes pedir disculpas... yo estoy tranquila, sin resentimientos”, aseguró.

Sobre su relación con el participante Miguel Melfi, contó que siguen manteniendo contacto por teléfono. “Hacemos videollamadas”, aseguró Bravo, y contó que el panameño negó el supuesto beso con Cevallos. “Me dijo que no pasó, yo no sé si es verdad”, expresó, e indicó que desea regresar al programa para dar continuidad a lo que quedó pendiente.

También fue cuestionada sobre los conflictos que mantuvo con Cevallos, a lo que respondió que ella fue agredida por la también ecuatoriana detrás de cámaras. “Las malas actitudes que mostró Mare al final fueron las que yo recibí detrás de cámara. Entonces ese nivel de agresividad era el que me ponía mal (...) yo pienso que nadie merece malos tratos. A veces yo iba al programa y sentía que ya no podía más”, dijo, y aludió que Cevallos también mantuvo un mal trato con el equipo de producción.

Publicidad

“El programa mostrará situaciones donde se demostrará quién es quién, y no solo en lo negativo, sino en lo positivo”, añadió.

Bravo sostiene que ella solo se mostró tal como es ante las pantallas, y dijo que fue su manera de ser lo que llamó la atención de su público, al que define como sus mejores aliados. “Yo fui real, sin poses, sin filtros, sin fingir... la gente se conectó desde mi ser”, señaló, e invitó a todos a que voten por ella en https://elpoderdelamor.tv/ para que pueda regresar a la casa de El poder del amor en Estambul. (E)

Publicidad