El príncipe Andrés se retiró dramáticamente este lunes de una aparición pública en el Castillo de Windsor. Durante la ceremonia de la Orden de la Jarretera, cuya participación estaba prevista, fueron el príncipe de Gales Carlos y el duque de Cambridge Guillermo quienes presionaron a la reina Isabel II para evitar que asistiera. La decisión se tomó claramente en el último momento, porque el nombre de Andrew estaba en la orden de servicio, dijo una fuente: ‘El duque de Cambridge se mantuvo firme. Si el príncipe Andrés, duque de York insistiera en participar públicamente, él se retiraría’.

Se dice que el duque de York presionó a su madre de 96 años para que se le restaurara su estado anterior de miembro de la realeza y se le permitiera regresar a los eventos oficiales.

También quiere que se restablezca su papel ceremonial como Coronel de la Guardia de Granaderos, por lo que continúa usando su chaqueta con la cifra y el lema del regimiento. Al parecer también está presionando para que sus hijas Beatriz y Eugenia se conviertan en miembros de la realeza. Las nietas de la reina, sin embargo, si estuvieron invitadas a las recientes celebraciones del Jubileo de la monarca, quien recientemente cumplió 70 años en el trono de Inglaterra.

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Andrés, de 62 años, fue despojado de sus deberes oficiales a principios de año mientras se preparaba para pagar un acuerdo multimillonario a una de las acompañantes de Jeffrey Epstein, Virginia Roberts Giuffre, quien lo acusa de abuso sexual, que el príncipe niega.

Pero anoche, el duque, que se perdió las celebraciones del Jubileo hace una semana porque tenía covid, se retiró dramáticamente de la ceremonia de la Orden de la Jarretera, a pesar de ser miembro de la antigua orden de caballería. Se dice que Carlos y Guillermo bloquearon a Andrés para que no apareciera en la ceremonia de la Orden de la Jarretera de hoy después de presionar a la Reina, según The Sun.

El Palacio de Buckingham había insistido en que Andrés asistiría a la ceremonia, porque la Reina le había otorgado dicho honor a título personal.

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Pero detrás de escena había una profunda preocupación por el espectáculo del príncipe avergonzado caminando en público con su túnica. También había temores de que pudiera ser abucheado. Se informa que la Reina le pidió que se mantuviera fuera de la vista del público y solo asistiera a elementos privados del evento de hoy.

Heredero al trono sin trato de realeza

Pero a pesar de esto, sigue siendo el noveno en la línea de sucesión al trono británico, y un consejero de Estado, lo que significa que podría reemplazar algún día a la Reina si ella está incapacitada y los príncipes Carlos y Guillermo están en el extranjero.

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El príncipe Andrés vive en los terrenos del castillo de Windsor y se dice que tiene contacto diario con su madre.

Semanas después de que ella lo despojó de sus títulos, la reina Isabel II le pidió que la acompañara al servicio conmemorativo del príncipe Felipe en la Abadía de Westminster en marzo, donde acompañó a su madre por el pasillo en un momento muy simbólico.

Pero se dice que los ayudantes de palacio, así como sus familiares, han dejado claro que la fuerza del sentimiento público en contra de sus vínculos con Epstein debe impedirle participar en los deberes reales de primera línea.

A pesar de su ausencia hoy, el duque cree que debería ser incluido en otros eventos reales y estatales, informó The Daily Telegraph.

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“El coronel de la Guardia de Granaderos era su título más codiciado y lo quiere recuperar”, dijo una fuente. “Habiendo seguido siendo Consejero de Estado, también cree que debería ser incluido en eventos reales y estatales. Lo más importante para él es su estatus como Su Alteza Real y ‘Príncipe de la Sangre’ y siente que debería ser reincorporado y su posición reconocida y respetada’. (E)