Hace poco más de un mes, Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa hicieron noticia cuando dieron a conocer que habían decidido no seguir más juntos y tomar caminos separados. La noticia tomó al público internacional por sorpresa, pues la madre del cantante Enrique Iglesias y el laureado escritor peruano habían conformado una de las parejas mejor consolidadas del espectáculo, tras una relación de casi 10 años de duración.

¿Por qué Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler terminaron su relación de 8 años?

Ha sido una ruptura claramente sin posibilidades de vuelta atrás, como ha dejado entrever el Nobel de literatura, cuando compartió en un fragmento literario que había cometido un error al “abandonar a Carmencita” (referencia de Carmen Balcells, su agente y gran cómplice) por un “enamoramiento violento y pasajero de la pichula, no del corazón”, como una especie de crónica de un arrepentimiento anunciado.

Esa posición ha vuelto a tomar fuerza en el presente tras una nueva entrevista mediática que el autor ha protagonizado en los últimos días, tras haber evitado pronunciarse sobre la sonada ruptura.

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Marío Vargas Llosa, de 86 años, e Isabel Preysler, de 71. Compartían 15 años de diferencia.

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En una conversación con el diario español El País, centrada en su trabajo como escritor, el entrevistador aprovecha las referencias literarias del diálogo para abordar finalmente la separación con la socialité de origen filipino. Durante el último mes, Vargas Llosa se ha mantenido escueto sobre el tema y prefiere continuar así por lo visto.

El periodista Manuel Jabois primero le interroga sobre su experiencia con la prensa rosa, desde que se difundió la inesperada separación. “¿Cómo sale uno de la tuneladora de la prensa rosa?”, indaga Jabois. “No haciendo ninguna declaración. Yo no he hecho ninguna sobre Isabel (Preysler, su última pareja). Y he tenido durante un mes periodistas desde las siete de la mañana plantados en el portal. Salía a caminar y ya me los encontraba”.

A continuación, el entrevistador insiste en este tópico y el escritor corta tajante la pregunta, aunque riendo: “Yo no voy a hablar de Isabel, para nada... La experiencia ha sido magnífica, pero no literaria. No se puede convertir en una novela, eso”.

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Cuando el reportero retoma la posibilidad de contar su noviazgo en una obra literaria, Vargas Llosa se ratifica en su postura: “No, para nada. Absolutamente. He terminado una novela sobre la música peruana, sobre el vals peruano... No, no voy a escribir una novela sobre esto (su noviazgo), para nada, ni voy a hablar de ella”.

El peruano reconoce que aunque son dos mundos muy distintos, aunque muy separados, no encuentra interés en relatar su relación. “La experiencia se vivió y ya está, vuelvo a estar en mi casa, rodeado de mis libros”. El Nobel de Literatura, quien tras el ‘divorcio’ con Preysler abandonó Madrid, remata la entrevista asegurando que, en todo caso, “no me arrepiento de nada, absolutamente”. (E)