Todos tenemos nuestra idea del paraíso: una utopía de abundancia y vida eterna, un ideal que moldea nuestras acciones y proyectos con tal de acercarnos a él cada día un poco más. Es lo que anhelan también Grel y Avelina, las protagonistas de Paraíso siteriano, la más reciente puesta en escena de la compañía Teatro del Cielo, disponible los viernes y sábados de noviembre en el Teatro Centro de Arte.

“Estos personajes están anhelando un paraíso ficticio, que solo está en sus mentes, y en ese deseo viven en una casa encerradas, sin contacto con el mundo real, solo preparándose para la llegada de este paraíso”, explica Martín Peña, director de Teatro del Cielo y quien también dirige la obra.

Otra forma de entender Paraíso siteriano, dice Peña, es como un manual que les dice a los personajes cómo vivir y comportarse, para poder ganarse este paraíso.

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“Es una obra totalmente absurda, pero la considero absurdamente real, considerando que mucha gente está esperando cosas, como ‘el mejor mañana’, pero se olvidan de vivir el hoy y no se dan cuenta de lo que tienen en este momento”, ilustra el actor especializado en la técnica del mimo corporal dramático.

La idea de la casa cerrada, donde Grel y Avelina (en la piel de las actrices Yanet Gómez y Frances Swett) se fortalecen como mujeres ‘siterianas’ en un mundo oscuro y patético, realmente representa una mente cerrada’, “que dice yo soy así, no cambiaré, para tratar de engañarse, o tal vez aliviar miedos”, agrega el dramaturgo de esta historia.

“Siento que hay mucha gente que vive así, en cuanto a su religión, política o filosofía de vida: no abren los ojos a ver la vida cómo se les presenta y no se dan cuenta de que al ser así están perjudicando su existencia… La obra muestra todas estas lecciones”.

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Por más de ocho meses Peña ha venido trabajando esta dramaturgia, que se ha creado mientras se fue montando. “Voy creando en la marcha, nunca escribo la historia antes para luego contarla, sino que se va creando simultáneamente”.

Por eso, Peña promete un despliegue escénico poderoso, con una expresividad visual impactante, tal como se caracteriza Teatro del Cielo. Los espectadores se sentirán inmersos en el pensamiento de cada mujer, serán parte de su emoción. “Toda la composición escénica es la representación de su mundo interno; para el espectador esto se convierte en un viaje sensorial, porque se complementa con un juego de luces, humo combinación de sonidos y movimientos”.

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¿Y qué es lo siteriano? “Nada”, confiesa Martín. “No quería caer en un tema específico o anecdótico. Para referirme a este paraíso irreal, prefiero un lenguaje universal que la gente lo identifique a sus propias situaciones. Por eso buscamos un término imaginario”.

Paraíso siteriano se estrenó el 12 de noviembre. Sus funciones siguen disponibles este viernes y sábado, 19 y 20 de noviembre, y luego el otro fin de semana, el 26 y 27 de noviembre. A las 19:30, en la sala Multiartes del Teatro Centro de Arte. Las entradas cuestan $ 15, en la boletería del teatro.