El dolor y la pasión que consumió a Medardo Ángel Silva (1898-1919) fue plasmado en letras en el transcurso de su corta vida. Poco o nada se conoce de lo que vivió en la intimidad de su hogar, en donde la llegada de una joven llamada Angelita Carrión dejó lo que sería la única descendencia del vate guayaquileño. Esta otra parte de la historia es recogida en la obra Medardo en casa, escrita por David Castro Egas, bajo una idea de Carlos A. Ycaza y dirigida por Adrián Cárdenas

El amorío entre Silva y Carrión es ilustrada en esta propuesta. “La obra se centra en la relación de ellos dos y cómo ellos luchan de alguna forma por poder llevar este amor, poder concretarlo y poder irse juntos a tener la vida que ellos quieren”, explica Cárdenas.

Foto: Cortesía

Esta pieza teatral fue presentada por primera vez hace dos años en formato de teatro leído en el Teatro Centro de Arte, hoy regresa a las tablas en una versión actuada al Estudio Paulsen, un espacio que se presta para lograr esa sensación de inmersidad que busca la puesta en escena; todo un desafío para su director.

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“Es un gran reto lograr meter al público y que se sienta parte de esta intimidad, que eso es lo que yo quiero lograr con el montaje... de hecho el público está muy cercano a los actores, usamos todo el espacio para poder simular los cuartos y a nivel de montaje ha sido interesante, pero el reto está más en lograr tener esa profundidad que en sí Medardo amerita, porque sus poemas eran así, sus poemas eran viscerales, eran sentimientos puros”, detalla el joven director.

“Lo artístico siempre va a estar muy guiado hacia el caos y el caos por lo general siempre parte de algo muy visceral”, reflexiona Sebastián Perdomo. El actor es el encargado de personificar al escritor, un papel que considera un honor hacer. “Van a ver a un Medardo que transita por estaciones familiares...”, afirma el actor.

“Hemos tenido mucho cuidado con pulir los detalles de lo que representa el personaje y de una u otra forma, lo que tal vez la gente nunca pudo escuchar, de lo que él quería contar”, adelanta Perdomo.

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El actor describe a Medardo Ángel Silva como un genio que estuvo atrapado en sus propias penas, sin poder alcancar su máximo potencial.

Foto: Cortesía

En la obra también actúan Marta Ontaneda, María Ortega y Antonella Valeriano quienes interpretan a Mariana Rodas (Madre de Medardo), La Mateita (La abuela) y Angelita Carrión, respectivamente. “Ellas (madre y abuela) tienen muchos complejos sociales y quieren que la familia progrese y para lograr eso, Medardo debe casarse con alguien de una familia que tenga recursos...”, reseña Cárdenas.

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Medardo en casa se presenta en el Estudio Paulsen (calle Numa Pumpilio Llona 195. Barrio las Peñas) hasta el 5 de noviembre, los jueves, viernes y sábado a las 20:30. La entrada tiene un costo de $20.00. (I)