Ha llegado a Netflix la temporada 2 de The Witcher, y la audiencia sigue cautivada por las aventuras del brujo Geralt de Rivia y Cirilla, princesa de Cintra, caracterizados por el inconfundible Henry Cavill y la actriz Freya Allan (también británica).

El programa se basa en la serie de libros de Andrzej Sapkowski, conocida como la Saga del brujo, y no en los videojuegos, que es como muchos conocieron las hazañas de Geralt y sus amigos.

Si bien es cierto que la primera temporada preparó el tono de la serie, gracias a los saltos intermitentes en el tiempo, entre el pasado y el presente, la segunda parte entrega un relato más lineal en sus ochos episodios, disponibles en la plataforma desde el 17 de diciembre.

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La trama encuentra a Geralt y Ciri enlazados por el destino, pero no de la forma romántica, por cierto, sino por un designio que se explica en la primera entrega. Convencido de que la vida de la hechicera y su único amor Yennefer (Anya Chalotra) se perdió en la batalla de Sodden, el brujo lleva a la princesa al lugar más seguro que conoce, el hogar de su infancia: Kaer Morhen.

Mientras ambos acoplan al otro a sus vidas, él debe proteger a la niña de algo mucho más peligroso: el misterioso poder que ella posee en su interior.

En este desarrollo veremos nuevos rostros en el elenco. En primer lugar aparecen cuatro brujos, que serán familiares para los seguidores de la saga editorial o los videojuegos. Ellos son Vesemir, el brujo más viejo y experimentado, además de ser el hombre que crió a Geralt en Kaer Morhen desde muy joven, interpretado por el danés Kim Bodnia; Lambert, en cambio, es el brujo más joven y un poco sarcástico, caracterizado por Paul Bullion.

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Los otros son Eskel, a quien le da vida Thue Ersted Rasmussen; y el entrenador de combate con espadas de Ciri, Coën, por Yasen Atour.

En segundo lugar una incorporación interesante es Kristofer Hivju como Nivellin. Los fanáticos de Game of Thrones lo recordarán como el imponente guerrero Tormund Giantsbane.

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Las criaturas fantásticas y sobrenaturales también son parte de este universo de magia, hechizos y secretos que se aclaran cuando al destino se le antoja. En esta ocasión veremos a vampiros, leshens, hasta una casa flotante. La temporada 2 también profundizará en el oficial Cahir (Eamon Farren) y la hechicera Fringilla (Mimi Ndiweni), los villanos de la trama hasta el momento.

La segunda parte de The Witcher llega exactamente dos años después del estreno de la primera temporada. La producción tuvo un par de retrasos debido a la pandemia de COVID-19. Netflix había suspendido la producción de todos sus programas durante los primeros meses de la emergencia sanitaria.

El elenco se reunió en el set a partir del 17 de agosto de 2020, y luego la filmación se detuvo en noviembre de 2020, debido a que cuatro miembros del equipo dieron positivo al virus. Se reanudó, pero en diciembre de 2020, Henry Cavill sufrió una lesión menor en el set que ralentizó la filmación nuevamente.

Finalmente, la grabación de la última temporada terminó a principios de abril de 2021, y en mayo inicio la posproducción.

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