Minutos antes de las 07:00 de este viernes, tres pelotones de policías se adentraron a un terreno invadido en la parroquia Posorja, saturado de covachas.

Detrás de ellos accedió un grupo de policías metropolitanos, más un contingente de obreros municipales que empezó a tumbar decenas de cuartuchos de caña con techos plásticos, labor que se aceleró con el uso de tres retroexcavadoras.

El desalojo de un terreno de propiedad privada, que según la Gobernación del Guayas medía 120 hectáreas, se efectuó sin contratiempos ante la ausencia de posesionarios, puesto que estos no trasnochaban en las covachas, sino que llegaban a estas en horas del día.

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El terreno había sido desbrozado hace dos meses y ello propició la invasión, con el aumento de interesados conforme pasaban los días.

Según el general Ramiro Ortega, comandante de la Policía Nacional en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), se habían levantado unas 1.000 casuchas e incursionado alrededor de 1.500 personas.

Betty López, posorjeña, y el manabita José Zambrano, nativo de Calceta, entre otros posesionarios, llegaron en momentos del operativo para desarmar sus covachas y así recuperar cañas y planchas de zinc. Señalaron que buscaban un pedazo de tierra y que estaban dispuestos a pagarle al dueño.

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“En Posorja se vive como sardinas en lata, dos o tres familias en una misma casa”, mencionó la mujer. Él, jefe de otro grupo familiar, dijo que tenía dificultades para pagar un arriendo de $ 150 por un departamento.

En el sitio identificaron al Colorado como la persona que habría desbrozado el terreno utilizando maquinaria pesada, pero sostuvieron que en cuanto ingresaron dos o tres invasores hubo un efecto multiplicador.

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El gobernador Pedro Pablo Duart, en rueda de prensa realizada afuera de la Unidad de Policía Comunitaria de Posorja, sostuvo que antes de la incursión ya habían sido detenidas dos personas como presuntas promotoras de la invasión.

Acompañado del general Ortega y de Evelyn Montalván, secretaria técnica de prevención de asentamientos humanos irregulares, sostuvo que impulsarán sanciones en contra de los responsables de jugar con los sueños de familias que anhelan un techo propio. Remarcó que las covachas estaban deshabitadas y que hace dos semanas la Gobernación ejecutó un desalojo en el cantón Yaguachi.

La secretaria técnica Montalván dijo que se habían reunido dos veces con los supuestos posesionarios para alertarlos de los delitos en los que estarían incurriendo al ingresar a terrenos privados. Señaló que la Fiscalía indaga tráfico de tierra y uso indebido del suelo.

Comentó que detectaban una nueva modalidad de invasión, en la cual los promotores no cobraban por el terreno pero sí por servicios. “$ 20 por 1.000 personas les daba un monto considerable, trabajan por volumen”, sostuvo. (I)

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Accidente afectó a policías

En el retorno a Guayaquil, un grupo de policías sufrió un accidente de tránsito, cerca del peaje del km 24 de la vía a la costa, según reportes.

Sin servicios básicos

No había instalaciones eléctricas ni tanques que den cuenta de que los posesionarios disponían de agua para su consumo. Tampoco había letrinas.

El tema ya no es vender el terreno sino promover el suelo; es decir, te digo ‘asiéntate en el sitio’ y de aquí a 15 o 30 días te digo ‘vamos a pedir una cuota para cualquier papel". Evelyn Montalván, secretaria técnica de prevención de asentamientos humanos irregulares.