Las denominaciones que tienen en la actualidad las calles de Guayaquil han sufrido modificaciones con el crecimiento urbanístico de la ciudad. En la época colonial, sus nombres se asociaban a hechos característicos que ocurrieron en esas zonas, por alguna relación laboral o de producción.

Para 1572, el promedio de la población en Guayaquil era de 320 personas. También estaba compuesta por 25 casas en el cerro, según el historiador Miguel Cantos. A inicios del siglo XVII, la ciudad empezó a expandirse hacia el sur, por diversos hechos, como los incendios que la azotaban.

“Como la ciudad se iba incorporando como uno de los principales astilleros, creció hacia el sur. Las primeras dos calles que nacen con esta expansión urbana son la calle Real, que es la actual Rocafuerte, y la calle Nueva o de la Orilla, que es la av. Malecón Simón Bolívar”, explicó Cantos.

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A través de estas calles se unificaban Ciudad Vieja y Ciudad Nueva, esta última comprendida por los asentamientos que se extendieron hacia el sur y atravesados por los cinco esteros: Lázaro, Morillo, Campos, Junco y Villamar. Para el siglo XVIII, el puente de 800 varas cruzaba estos sitios y conectaba los dos sectores.

“El puente de 800 varas cruzaba todos estos esteros. La calle Rocafuerte solamente llegaba hasta el primer estero, de norte a sur. Luego por la expansión obligan a que sea utilizada como continuidad, porque el puente duró casi 70 años, fue derrumbado y empezó el relleno”, manifestó.

El historiador agregó que al no haber un proceso urbanístico concreto, las calles empezaron a ser denominadas según la idiosincrasia popular, por la relación laboral, de producción o de hecho histórico.

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Citó la calle Escobedo, que en la época colonial era denominada como de los Trapitos, porque en el sitio se vendían telas. “Por ejemplo, tenemos la calle del Cangrejito, que vendría a ser la actual calle Mendiburo, también está la calle del Foso del hospital o del Puerto de pescado, que vendría a ser la Illingworth”, explicó.

La actual calle General Córdova tuvo varias denominaciones. En sus inicios era conocida como calle del Caracol, luego como de la Gallera, al existir en el sitio un predio donde las personas asistían para presenciar peleas de gallos. “Posteriormente con el triunfo de la Revolución Liberal se convirtió en la calle Vargas Torres”, refirió el historiador.

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La calle Víctor Manuel Rendón era conocida como del Tigre, en la época colonial, y después de la independencia pasó a llamarse Bolívar. La actual calle Aguirre Abad era denominada calle del Correo. El bulevar 9 de Octubre era conocido como calle de los Franciscanos, por la ubicación de la iglesia Nuestra Señora de los Ángeles. Previamente también fue denominada calle del Foso, del Corte y de la Artillería. La céntrica Boyacá era conocida como calle Ancha.

“Hay que repensar cómo era la ciudad en los siglos XVII y XVIII. Era muy pequeña y no había necesidad tampoco de crear otro tipo de nomenclatura”, explicó Cantos.

En el siglo XIX, la calle 10 de Agosto era de la Municipalidad, pues en ella estaba situada la sede del cabildo. Julián Coronel era denominada la calle de la Amargura, por la ubicación del hospital Civil (Luis Vernaza), la cárcel municipal y un asilo. La calle Lorenzo de Garaycoa era llamada Santa Elena. Hay quienes aún la conocen con ese nombre.

Lo mismo con García Avilés, antes llamada Chanduy; Rumichaca, que era calle Morro, o la calle José de Antepara, denominada Santa Rosa.

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La calle Eloy Alfaro, en el barrio del Astillero, era denominada Industrias, por el asentamiento de empresas. Clemente Ballén era conocida como calle de las Aduanas.

“A partir del proceso de modernización de Guayaquil se da otro tipo de situación y la ciudad comienza a dividirse por sectores, por cuadrantes, pero eso a partir del siglo XX”, dijo.

Actualmente hay varias calles que tienen, en la voz popular, doble denominación. Es el caso de la Carlos Guevara Moreno, en el suroeste, que también es conocida como 4 de Noviembre. Así también Federico Goding, llamada “la 11”.

Y hay casos de calles que cambian sus denominaciones. Por ejemplo, Panamá pasa a llamarse Pichincha a la altura de la avenida 9 de Octubre. También la avenida Domingo Comín, que se inicia en el sur y pasa a llamarse Eloy Alfaro, cambia su nombre a Pedro Carbo y luego Rocafuerte. (I)