Las invasiones de tierra en el sector del noroeste de Guayaquil no solo son en las cooperativas y en sectores recónditos aledaños al trasvase que cruza por el sector de Monte Sinaí, ahora llegan también a los propios terrenos municipales en los que se van a construir proyectos habitacionales que eviten la proliferación de este problema.

Así lo denunció ayer la directora de la Empresa Pública de Vivienda Municipal, Patricia Rivera. Ella comentó que personas han ingresado a los terrenos municipales de forma ilegal y que denunciaron a las personas que han tratado de vender los planes habitacionales por su cuenta.

“Por favor, les decimos a los ciudadanos, los planes de vivienda se venden en el Municipio de Guayaquil. Las oficinas están en el Mall El Fortín, no se los vende en la calle, en las esquinas. Solo se pagan $ 100 para iniciar el proceso, no puede pagar nada más a nadie, no dejarse estafar”, alertó la funcionaria ayer.

Publicidad

El concejal Egis Caicedo explicó que ante este nuevo caso y los muchos que se repiten no solo en el noroeste sino en todo Guayaquil, se harán nuevos operativos para evitar que estas personas sigan aprovechándose de las familias.

“Queremos que los ciudadanos opten por adquirir predios legales, directamente al Municipio, y que no se dejen engañar por los traficantes de tierra que regularmente se ubican en sectores complicados, riesgosos para las familias. Están tapando los canales para vender, están rellenando el estero Salado en el suburbio. Es de mucho riesgo, y no se puede jugar con las ilusiones”, expresó Caicedo.

Maritza Haro, directora de la Unidad de Invasiones del Municipio de Guayaquil, aseguró que los sectores más vulnerables con traficantes de tierra son Las Delicias, Cañaveral frente a Ciudad Victoria, Ciudad de Dios, en muchas cooperativas de Monte Sinaí. Y en la zona sur está Mélida Toral, en el sector de la Trinitaria. Y Proletarios sin Tierra en el Guasmo sur.

Publicidad

Xavier Narváez, director de Justicia y Vigilancia del Municipio, explicó que llevan 1.000 procesos administrativos sancionadores que han consistido en el desarme y retiro de las covachas y de las estructuras que se estaban levantando en áreas no permitidas. Esta es la cifra en los diez meses de operaciones que lleva esta unidad de creación en el Municipio de Guayaquil.

“No vamos a permitir que se sigan invadiendo esas zonas, que se expanda de manera desordenada, para eso están los planos de esos sectores, seguirán los controles”, aseveró Narváez.

Publicidad

Mientras tanto, el procurador síndico municipal, Carlos Barquet, expuso que estos traficantes de tierra pueden ser condenados de 5 a 7 años por infringir la ley por delito de tráfico de tierras, y que también se pueden vincular al delito de estafa. Él solicitó una reunión con entidades como la Secretaría de Asentamientos Irregulares del Gobierno Nacional para evitar más casos de tráfico de tierra. (I)