Una pequeña fila se formaba a ratos para ingresar a la Torre 2 del Omni Hospital, en el norte de Guayaquil. Cada persona tenía que acercarse a una cámara, sacarse la mascarilla para que se le registre su rostro y poder entrar.

Esta fue una de las medidas en seguridad que se hicieron el miércoles 11, día del ataque armado que se registró en ese hospital para acabar con la vida de Carlos Omar K., un ciudadano que el viernes 6 fue atacado por sicarios mientras circulaba por la ciudadela Kennedy.

Ahora las medidas de seguridad se han reforzado en ese y otros hospitales de la ciudad. Allí, por ejemplo, también se evidenció que hay más personal de seguridad privada dentro de las torres, más de tres agentes, uno con detector de metales que registrada a todos los que entraban al sitio.

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Ocho ataques armados se han registrado en casas de salud en últimos 20 meses

Y es que esta balacera se dio dentro del hospital, según la Policía Nacional, ya que los custodios se hicieron pasar por familia del paciente e ingresaron armas.

El hospital informó que se cumplen los protocolos de seguridad, pero que lamentablemente fueron vulnerados por la violencia armada de personas que irrumpieron en grupo por la fuerza a las instalaciones.

En exteriores del Omni hospital se evidencian los impactos de bala de ese ataque de la madrugada del miércoles. Foto: Jorge Guzmán. Foto: El Universo

Se añadió que se irán sumando mejores mecanismos de garantizar la seguridad. Este Diario solicitó información sobre este tema al Omni Hospital el pasado miércoles, pero hasta la tarde del viernes no hubo respuesta.

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Julio Esteves, administrador y asesor de seguridad de una torre médica del norte de Guayaquil, manifestó que es necesario no solo tener protocolos, sino cumplirlos a cabalidad para garantizar la seguridad en los hospitales.

Él detalló que se exigen las cámaras de seguridad interna, externa, registro de rostro, impedir el uso de gafas, gorras, y revisión de bolsos y detección de metal al ingreso porque el personal médico y pacientes no solo están expuestos al susto por ataques de sicarios, también de la delincuencia común.

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Los dos extranjeros detenidos por ataque armado en hospital daban custodia a Carlos Omar K. y habían entrado como familiares

Consideró que se debe hacer mayor control a quienes hacen seguridad privada, ya que hay muchos extranjeros que según la ley no pueden dar estos servicios.

“Hubo ya un incidente relacionado con personal de seguridad en una clínica del norte. Esto puede ser un riesgo para estos centros médicos. Hay que dar un buen servicio de salud a la comunidad. No podemos brindar seguridad a los ciudadanos si internamente no sabemos quiénes son portadores de arma o en contubernio están operando con estas bandas criminales”, expresó.

Uno de los acceso al hospitral Teodoro Maldonado del IESS. Foto Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

Y ¿cómo se realizan los controles en el área de emergencia de los hospitales y clínicas de Guayaquil?

Este Diario realizó un recorrido en dos días por hospitales y clínicas de la urbe para conocer cómo se realizan los controles. Por ejemplo, en el hospital Teodoro Maldonado Carbo del IESS, dos guardias de seguridad se encargan del control del área de emergencia.

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Un equipo constató el registro manual de los bolsos de personas que llegaron a ver a sus pacientes, a algunos no se les permitió el ingreso de comida.

Para prevenir ataques, el Gobierno impulsa el llamado Código Plata. Foto: El Universo

Mientras, en el hospital Alcívar también están dos guardias privados en la puerta de emergencia y realizan el chequeo al ingreso de ese sitio. Además de la vigilancia con cámaras de seguridad.

En hospitales como el Luis Vernaza de la Junta de Beneficencia de Guayaquil hay guardianía y cámaras como mecanismo de seguridad en los ingresos tanto a consulta externa, emergencia como a hospitalización.

En la emergencia hay tres guardias privados, uno que impide que vehículos se queden dentro de esa zona. Se pide cédula de identidad para ingresar y se retiran a las personas que no están esperando pacientes por seguridad.

En el hospital Luis Vernaza se mantiene seguridad privada y control de cámaras de videovigilancia. Foto: Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

En la clínica Guayaquil, en el centro, y en la San Francisco, en el norte, también los guardias les piden la cédula de identidad a los visitantes y además se exige el uso de la mascarilla.

Adicionalmente se realiza un control visual y manual en el ingreso a la emergencia y al hospital. (I)