En medio del reclamo que persiste por parte de conductores, los dispositivos de control de velocidad y de luz roja, ubicados en diferentes puntos de Durán, cumplieron su primer mes de operación. El 1 de diciembre, después de 45 días de socialización, entraron en funcionamiento en ese cantón.

Los aparatos fueron colocados por la Autoridad de Tránsito de Durán (ATD) con la finalidad de captar a infractores de tránsito, controlar el flujo vehicular y evitar siniestros en vías altamente concurridas.

Con corte a diciembre, la ATD contabiliza que se han procesado cerca de 6.000 infracciones de tránsito, que corresponden en su mayor parte a exceso de velocidad (71 %). Esta causa, señala la autoridad, es uno de los elementos que generan accidentes de tránsito y la primera en lesividad (muerte y lesiones graves).

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Multas de los fotorradares de Durán serán anuladas y rango del límite de velocidad en la Nicolás Lapentti se ampliará

La entidad de tránsito destaca que con la entrada en funcionamiento de estos aparatos y sumado al control que ejercen los agentes civiles de tránsito, hasta el momento no se han registrado siniestros en vías que, regularmente, tenían un índice alto de accidentes con fallecidos y heridos. La avenida Nicolás Lapentti es una de ellas.

El número de multas se reconfiguró a mediados de diciembre luego de que se establecieran nuevos límites de velocidad para vehículos livianos (70 km/h) y pesados (50 km/h) en la avenida Nicolás Lapentti y se anularan las multas generadas por exceso de velocidad entre el 1 y 9 de diciembre de 2022.

En ese entonces, la ATD indicó que 3.000 sanciones se eliminarían de forma automática para los conductores.

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En redes sociales, varios usuarios han señalado que aún se les reflejan las sanciones a cancelar y que esperan respuestas por parte de la institución.

“Desde la multa que fue, supuestamente, el 2 de diciembre aún me aparece”, “¿Cuándo podemos saber si se nos va a eliminar la multa? quiero matricular mi vehículo”, son algunos de los mensajes publicados en la cuenta de Facebook de la ATD.

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Los aparatos están colocados en diferentes puntos de Durán. Foto: El Universo

En la ciudadanía aún hay cierto rechazo por el funcionamiento de los fotorradares. Algunos conductores afirman que estos aparatos se han convertido en una especie de “fábricas de multas”.

“No dan soluciones, pero si cobran multas”, dice Pedro Rosero. Él recibió la notificación de una infracción por pasarse una luz roja el 22 de diciembre. “Me sale la multa de pasarme un semáforo en rojo, pero es un semáforo que no tiene luz amarilla sino que del verde pasa al rojo y ahí no se sabe el minuto en el que va a cambiar”, afirma el usuario.

A José, otro conductor, la multa por exceso de velocidad le llegó al correo el 29 de diciembre. Él recuerda que el día anterior cuando se movilizaba desde la ciudadela El Recreo hacia Guayaquil transitó por la avenida Nicolás Lapentti, pero no sobrepasó los 70 km/h.

“Cómo me va a salir que me pasé de la velocidad si recién salía de mi casa, no iba rápido, era de noche y cuándo más cuidado tengo porque voy con mis hijos”, relata el conductor, quien trató de impugnar la sanción para no cancelar los $ 212 que corresponden al valor de la multa por exceder límite de velocidad fuera del rango moderado.

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Daniel Beltrán, morador del sector de Divino Niño, señala que aunque no está de acuerdo con la multa que se le impuso por exceso de velocidad, la va a cancelar si de esta manera se comienza a educar a los conductores.

Sin embargo, hace un reparo e insta a las autoridades de tránsito a que, así como colocan sanciones, revisen el funcionamiento de los semáforos en el sector del cementerio, Elsa Bucarám y Abel Gilbert.

Allí, asegura, por momentos las luces están intermitentes y se generan inconvenientes para el tránsito vehicular.

Otra recomendación es que se coloquen semáforos inteligentes en la esquina de la gasolinera de la avenida Jaime Nebot Velasco. “En la madrugada y en horas pico se podría mejorar el flujo de carros que van hacia Guayaquil o los que salen de Durán”. (I)