Las enfermedades causadas por parásitos son las que lideran la lista de males que afectan en mayor medida a las mascotas de los guayaquileños. El dato se desprende de un ranking elaborado por la Dirección de Bienestar Animal, basado en la cantidad de atenciones que se registran en el Centro de Bienestar Animal del Municipio.

El centro, ubicado en la avenida Francisco de Orellana y el desvío a la autopista Narcisa de Jesús, está equipado con un laboratorio, rayos X, quirófanos, medicinas en las farmacias, áreas pos- y preoperatoria, y un área para perros y gatos con enfermedades contagiosas. La sede abrió sus puertas en octubre.

Shirley Moreno, directora de Bienestar Animal, indicó que las enfermedades ocasionadas por hemoparásitos concentran el 20 % de las atenciones. Las afecciones virales ocupan el segundo lugar, con otro 20 %; allí entran problemas respiratorios y digestivos de las mascotas.

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Vanessa Moreira perdió hace tres meses a su perra Sassy y a dos cachorros por un brote de garrapatas. El descuido en el aseo del can derivó en que adquiera la erliquisosis. Sassy y los cachorros fueron ingresados a una clínica canina, pero no resistieron, ya que los síntomas se agravaron al pasar los días. Los canes registraban fiebre, vómitos, sangrados nasales, decaimiento y problemas respiratorios.

Tres clínicas móviles se sumaron al trabajo de cuidado animal para efectuar 5.000 cirugías cada una por año

“Mi perrita pasaba en un solar vacío que teníamos. Ella ya tuvo la enfermedad de la garrapata antes de quedar preñada, pero no sabía que le iba a pasar a los perritos. Yo tuve a mi bebé y me descuidé de los perritos”, contó Moreira.

Según Moreno, esta enfermedad principalmente se puede prevenir con un correcto aseo de las mascotas y con la colocación de un producto para evitar la presencia de garrapatas en perros y pulgas en gatos.

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En el caso de los problemas virales, explicó Moreno, colocando las vacunas correspondientes se evita que las mascotas adquieran el parvovirus, el distemper (moquillo), el adenovirus y la hepatitis viral.

“Hay que entender que no hay cura para los virus; lo que se hace es paliar los síntomas, esperar a que el animal evolucione y resista al tratamiento”, indicó Moreno.

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Gatos y perros son atendidos en el Centro de Bienestar animal. Foto: Priscilla Alvarado

El veterinario Luis Oviedo explicó que estas últimas afecciones son mortales si no se las detecta a tiempo. En su consultorio, ubicado en el norte de la urbe, recibe un 50 % de mascotas que están con los primeros síntomas y que, al recibir tratamiento, superan la peligrosidad del virus.

Pero, asimismo, recibe a otro 50 % de mascotas que no logran pasar del primer día de hospitalización o que los dueños no alcanzan a costear los tratamientos.

Por ejemplo, citó que hace dos meses recibió al menos a cinco perros con parvovirus. “Los dueños de tres perritos eran del suburbio. Llegaron con los animales casi en agonía. Cuando se les dijo el costo del tratamiento (casi $ 120), dijeron que no tenían cómo costearlo. Por las mismas se los llevaron”, contó Oviedo.

Los otros dos perros, en cambio, aunque estuvieron internados cinco días, no salieron del cuadro de parvovirus. Oviedo indicó que otras de las dolencias más comunes que recibe en su veterinaria tienen que ver con cuadros avanzados de cáncer.

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A las mascotas rescatadas de Guayaquil ya se les coloca microchip que servirá para identificarlas

De hecho, este mal también figura entre las cinco enfermedades más comunes registradas en el Centro de Bienestar Animal. Los tumores venéreos transmisibles ocupan el 10 %, las dolencias en las vías urinarias en gatos concentran el 15 % y, por último, están los diferentes tipos de emergencias. En ese último grupo ingresan los atropellamientos, ataques entre mascotas e intoxicación.

Los expertos recomiendan la revisión periódica de la salud y aseo de las mascotas, mantener una dieta equilibrada y estar al día en las vacunas. Este último punto se recomienda para las mascotas en su fase de niñez. En el caso de los adultos, se recomienda un chequeo mínimo dos veces al año.

Asimismo, señalan que es necesario identificar los síntomas de las enfermedades lo antes posible para poder comenzar con el tratamiento específico. (I)