La candidatura del estadio Monumental Isidro Romero Carbo fue presentada en conjunto entre Barcelona, el Municipio de Guayaquil y la Federación Ecuatoriana de Fútbol. Uno de los factores importantes para que la Conmebol se decida por Guayaquil fue que hace 200 años (26 y 27 de julio de 1822) sucedió el encuentro de los próceres Simón Bolívar y José de San Martín.

Así, por tercera ocasión Guayaquil será sede de la final de la Copa Libertadores de América, pero esta vez se jugará a partido único con rivales aún por conocer. En las dos oportunidades anteriores del torneo de clubes más importante del continente, la Copa estuvo en la Perla del Pacífico en 1990 y 1998, cuando Barcelona se enfrentó a Olimpia (Paraguay) y Vasco da Gama (Brasil), respectivamente.

Este evento, que se llevará a cabo el próximo 29 de octubre, significa un hecho histórico para Guayaquil, no solo en lo deportivo sino también en lo económico. Carlos Alfaro Moreno, presidente de Barcelona SC, menciona que la final de la Copa dejará a la ciudad cerca de $ 60 millones por concepto de turismo.

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El Monumental tendrá varias readecuaciones, entre ellas la mejora del césped; nueva pantalla led, ubicada en la general sur; butacas para las generales sur y norte, tanto para las plateas altas y bajas; remodelación del camerino visitante y de las bancas de suplentes. Foto: Francisco Verni Peralta

El dirigente torero dice que la elección del Monumental no fue sencilla porque les tocó competir con otras ciudades que tienen mejor infraestructura y además que no habían sido tan golpeadas por la pandemia del COVID-19.

La designación de Guayaquil es un hecho importante porque ayudará a la ciudad a reactivarse económicamente, luego de lo mal parada que había quedado por las lamentables imágenes que recorrieron el mundo debido al coronavirus

Carlos Alfaro Moreno, presidente de Barcelona S.C.

Gloria Gallardo, presidenta de la Empresa de Turismo, Promoción Cívica y Relaciones Internacionales de Guayaquil, enfatiza que este suceso es una gran oportunidad para presentar a la urbe como un “gran destino turístico internacional y así mostrar todos los atractivos que tiene la Perla del Pacífico”. Para lograr este objetivo, Gallardo cuenta que están trabajando en conjunto con el Ministerio de Turismo, empresa privada, la academia, la Policía Nacional y la Corporación de Seguridad Ciudadana. “Lo primero que debemos hacer es resguardar la seguridad de los turistas”, puntualiza.

El malecón Simón Bolívar, donde está ubicada la noria, servirá como punto de encuentro para que los fanáticos vivan más de cerca la final de la Copa Libertadores. Gallardo comenta que este lugar fue elegido por parte de los delegados de la Conmebol y será denominado como “la embajada del hincha”. Aquí se podrán realizar varias actividades que serán protagonizadas por los sponsors y empresas que se vayan sumando al evento.

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Holbach Muñetón, presidente de la Federación de Cámaras de Turismo del Ecuador, dice que el impacto de este suceso deportivo es muy fuerte en beneficio de Guayaquil. “Poner el nombre en primera plana de Guayaquil y del país en el mundo será muy importante en el tema turístico. No solamente por la cantidad de personas que vendrán al país, que serán cerca de 50.000, sino también por los millones de espectadores que tendrá este evento”.

El sector hotelero, que se verá lleno durante aproximadamente 15 días debido a que en la fecha que se jugará la final también habrá varios conciertos, no será el único beneficiado, dice Muñetón. “Restaurantes, centros comerciales, bares y varios negocios verán crecer sus utilidades”. Al igual que Gallardo, él también coincide en que la seguridad es un factor muy importante al que se debe reforzar. “La estadía que tengan en Guayaquil los turistas debe ser segura, pacífica y tranquila”.

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Para Muñetón, esta edición superará a la celebrada en noviembre del 2019 que se disputó en Lima entre Flamengo y River Plate, la cual bordeó los $ 62 millones de ingresos en la economía peruana, según el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo de ese país. (I)