Han transcurrido ocho años y el cambio es notorio en la apariencia de Mateo Sigüenza. Era niño cuando protagonizó una escena en un partido mundialista de Ecuador y sus gestos de aliento al país se viralizaron. Ahora, como mayor de edad, vivirá nuevamente una experiencia en la máxima competencia del fútbol desde las tribunas de los estadios de Qatar.

Con apenas diez años, en el estadio Arena da Baixada, de Curitiba, Mateo se volvió tendencia mundial al proyectarse por televisión en medio del partido Ecuador versus Honduras con su indumentaria de la Tricolor, tomar el escudo de la camiseta y tocarlo de manera efusiva para pedir a los jugadores que se entregaran más en el campo de juego.

Ahora, Mateo cuenta los días para asistir a una nueva cita mundialista, en esta ocasión en Qatar 2022. A sus 18 años, él cumple con sus obligaciones colegiales, es seleccionado de fútbol en su plantel educativo y está por graduarse con la aspiración de seguir una carrera en negocios.

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En días previos a su vuelo hacia Doha, él accede a recibir en su hogar a este Diario para hablar de la alegría que tiene de acompañar nuevamente a la Tri. Esta vez, además de su padre, Kléber, planea ir con otros cuatro familiares.

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“A mi papá le encanta ir al Mundial. Es una fiesta, un show; es increíble. Como soy superaficionado del fútbol, estoy emocionadísimo. Es una pasión que se vive en el estadio. Los jugadores se les ve que están nerviosos; todos están así. Es una euforia: todo el mundo está emocionado de ver a su país, representado de su país”, comenta el joven.

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En su hogar, un álbum especial recoge capturas de pantalla y fotografías compartidas en redes sociales, medios de comunicación, además de recortes de prensa de su aparición en televisión en ese partido en Curitiba. También en esas hojas se guardan fotografías de su experiencia en Brasil 2014. En otro cuaderno similar tiene otros recuerdos de Rusia 2018, adonde también pudo asistir y ver varios partidos de la selección Argentina, con su ídolo: Lionel Messi.

Era un gesto de angustia y pasión: en ese momento no nos salía el gol; fue más la angustia y estar molesto porque no salía el gol, y también la pasión de hacerlo y ansiarlo; eso creo que ayudó. Yo llegué saltando al hotel donde estábamos quedándonos. Fue un momento de shock (el enterarse de su viralización): que había salido en la televisión. Le mandaron mensajes a mi papá y lo reventaron (de publicaciones) en Twitter”.

Mateo Sigüenza, joven viralizado en Mundial de Brasil 2014

Él cuenta que se considera un apasionado del fútbol, puesto que en cada encuentro, tanto de la Tricolor como de su equipo, el Club Sport Emelec, si ganan o pierden, lo vive con profunda alegría o tristeza dependiendo de los resultados.

“Va a ser una experiencia única. Qatar es un país más pequeño y se interconecta fácil. Vas a conocer y estar con personas de todas partes del mundo. Ir como ecuatoriano me hace sentir muy bien. Ahora vivo de una manera más apasionada, y me encantará volver a apoyar como lo hice en el otro Mundial”, comenta este joven, que se muestra orgulloso de poder representar al país como hincha.

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Mateo Sigüenza guarda un álbum de publicaciones y recortes de prensa sobre la anécdota suscitada en el partido Ecuador versus Honduras. Foto: El Universo

En su equipaje, él ya tiene lista la camiseta y una bandera azul del Emelec, además de dos indumentarias de Ecuador: tanto la oficial que lucirán en el Mundial como la de la pasada Copa América.

Para la primera etapa de grupos, él planea principalmente asistir a los partidos de Ecuador con su padre y otros cuatro familiares; además, aspira a poder ir a otros tres partidos de otras selecciones, dependiendo de la disponibilidad de boletos.

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Sobre el equipo tricolor, Mateo recalca que tiene gusto especial por el juego de Pervis Estupiñán y Moisés Caicedo, por su juego decidido y fortaleza al desempeñarse en el campo de juego. “Tienen actitud, y eso es lo que hace falta”, comenta.

Entre sus amigos, él hace proyecciones del camino que podría tomar Ecuador en el Mundial. Por lo menos, él mantiene la fe en alcanzar los octavos de final, teniendo en consideración que podría toparse con Inglaterra si queda segundo en el grupo; o, en su defecto, ante Gales o Estados Unidos si tiene un desempeño superlativo y alcanza el primer puesto de su grupo.

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“Siempre (hay que) tener expectativas altas, pero nunca fuera de lo realista. Hay que pensar que Ecuador es un país que ha tenido mucho crecimiento en el fútbol y que sabemos que tenemos que demostrarlo...”, dice Mateo, quien incluso en su colegio es conocido por los profesores como el joven que se viralizó siendo niño debido a su pasión por el fútbol.

Mateo se ausentará temporalmente de las clases, por lo que solicitará permiso con la misión de alentar a la Tri en los tres partidos de grupo de Ecuador. (I)