Los guerreros ninja van al campo donde acaban de plantar trigo. Obedeciendo la orden del entrenador, saltan sobre los lugares donde se sembraron las semillas.

Todos los días los guerreros ninja regresan al campo. Las semillas se convierten en capullos y los guerreros saltan sobre ellas. Los brotes se convierten en pequeñas plantas y los guerreros saltan sobre ellas.

No se aburren. No sienten que sea una pérdida de tiempo.

El trigo crece y los saltos se hacen cada vez más altos. De esta forma, cuando la planta está madura, los guerreros ninja aún logran saltar sobre ella.

¿Por qué? Como resultado de su salto sobre lo que muchos pueden haber visto como insignificante, les ha permitido ser muy conscientes de sus obstáculos.

(Tomado de Manual del guerrero de la luz).

Una breve historia

El guerrero ninja era el más atrevido y, al mismo tiempo, el que mejor desarmaba los golpes del enemigo.

“¿Qué hiciste para pelear tan bien?”, preguntó un guerrero.

“Morí”, respondió el ninja.

Los guerreros se rieron. Después de todo, el hombre que dijo esto estaba parado frente a ellos, vivo y bebiendo vino.

“Al final de mi aprendizaje, el maestro luchó contra mí y me derrotó”, dijo el ninja, mostrando una cicatriz en el cuello.

“Esta es la marca de tu espada. Entonces el maestro dijo: ‘Mueres ahora mismo. El resto de tu vida es ganancia, así que no daré el golpe final. No necesito’”.

“Y así fue. Y como el rey de la muerte ya me ha alcanzado, no tengo miedo de la vida”.

¿Qué significa ser guerrero de la luz desde el enfoque del autor?

En el libro Manual del guerrero de la luz, Paulo Coelho nos muestra que el guerrero vive dentro de cada uno de nosotros, y que solo alguien que es capaz de escuchar su corazón, que acepta sus derrotas sin resultar abatido por ellas, alimentando la esperanza en medio del cansancio y el desaliento, despertará y dará vida a ese guerrero de luz.

«Si solo piensa en la meta, el guerrero de la luz no conseguirá prestar atención a las señales del camino».

Es una de las citas del mencionado libro, que también destaca el hecho de que, si bien somos capaces de contemplar sin espanto viajes interplanetarios y clonaciones de seres vivos, tal vez nos falte, en cambio, el valor suficiente para sumergirnos en lo más íntimo de nuestro ser.

El Manual del guerrero de la luz concentra toda la filosofía del escritor brasileño y es una invitación a que cada uno de nosotros viva su sueño, abrace la incertidumbre de la vida y se atreva a perseguir su singular destino.