La velocidad de paseo que registraba el poderoso depredador del Juràsico tiranosaurio rex equivalía a la que presentamos los humanos actuales, unos 4,6 kilómetros por hora, según un nuevo estudio.

Seres humanos y animales tienen una velocidad preferida al caminar. Esto está, en parte, influenciado por la cantidad de energía requerida: prefieren caminar a la velocidad a la que usan la menor cantidad de energía posible. Una de las formas de lograr esto es usando la resonancia entre la velocidad y el movimiento rítmico del cuerpo.

Esto funciona para animales que caminan sobre cuatro patas y para animales de dos patas como humanos y avestruces. Pasha van Bijlert, estudiante de Ciencias del Movimiento Humano en la Vrije Universiteit en Amsterdam (VU), aplicó la idea a un animal que caminaba de manera diferente a cualquier cosa que camina sobre la tierra en este momento: tyrannosaurus rex. Estos dinosaurios carnívoros no solo tenían dos patas, también tenían una cola enorme que les ayudaba a moverse.

Publicidad

Al igual que los huesos de nuestro cuello, los huesos de las colas se mantienen unidos por ligamentos. “Se puede comparar con un puente colgante”, explica Van Bijlert. “Un puente colgante con una tonelada de músculo”. A cada paso, la cola se balancea hacia arriba y hacia abajo. Eso significa que, al igual que el balanceo, tiene una frecuencia natural a la que resuena”.

Para averiguar cuál es esa frecuencia, Van Bijlert y sus profesores Anne Schulp (Naturalis/Utrecht University) y Knoek van Soest (VU) construyeron un modelo 3D de Trix, el tyrannosaurus rex que se exhibe en el Museo Nacional Holandés de Historia Natural.

Agregaron músculos digitales al famoso esqueleto, y en este modelo muscular pudieron realizar análisis biomecánicos. De estos, derivaron la frecuencia natural y una velocidad de marcha preferida: 4,6 km / h (2,9 mph). Entonces, cuando Trix estaba de paseo, caminaba aproximadamente a la misma velocidad que un humano.

Publicidad

Van Bijlert, Van Soest y Schulp publicaron sus hallazgos en la revista Royal Society Open Science. “Ya había algunos estudios que investigaban la velocidad al caminar de los dinosaurios, pero principalmente miraban las piernas e ignoraban la cola, que es lo que hace que los dinosaurios sean tan únicos”, dice Van Bijlert. “Por lo general, encontraron velocidades de caminar mucho más altas. La que calculamos es más baja, pero es similar a la de otros animales”. (I)