Catorce toneladas de residuos y desechos especiales peligrosos provenientes de la isla Santa Cruz de Galápagos fueron trasladados, el pasado 21 de noviembre, a Guayaquil para su correcta disposición final. Esta iniciativa se enmarca en el Programa Nacional de Gestión de Químicos administrado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Ecuador (PNUD) y que cuenta con el apoyo del Ministerio Ambiente, Agua y Transición Ecológica (Maate) y del municipio local.

El Maate contrató un gestor ambiental, el cual recolectó, embaló, etiquetó, transportó y almacenó dichos residuos a fin de posteriormente realizar la disposición final del material recolectado. De esta manera se cumplió con el proceso bajo estrictas normas de seguridad, con el objetivo de evitar que los posibles Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP) provoquen cualquier tipo de daño.

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Entre los desechos de productos que contienen este tipo de contaminantes, destacan colchones que sumaron un total de 10 toneladas, espumas de refrigeradores, plásticos rígidos, equipos, aparatos eléctricos y electrónicos y otros residuos domésticos que pudieran contener este tipo de sustancias y que estaban depositados en el Centro de Reciclaje Fabricio Valverde del Municipio de Santa Cruz.

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Los residuos y desechos fueron rotulados previamente en Santa Cruz con la información de los riesgos asociados siguiendo lo indicado en la Norma NTE INEN 2266. Las 14 toneladas de desechos y residuos serán sometidas a un proceso de incineración de acuerdo a las recomendaciones del Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación. indicó el Maate en un comunicado.

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Por otra parte los equipos electrónicos serán desmantelados para liberar todos sus componentes (metales, plásticos, circuitos electrónicos, baterías, suministros de impresión, pantallas, entre otros) y aprovechar cada uno para que sean reincorporados en procesos productivos según corresponda, impulsando así la economía circular del país. (I)