Lo más importante en la búsqueda de un peso ideal es que las rutinas alimenticias no sean perjudiciales para tu salud; comer alimentos ricos en vitaminas y minerales mejorará la función inmunitaria de tu cuerpo. Además, comer una dieta bien balanceada puede ayudarte a disminuir el riesgo de contraer varias enfermedades.

Por qué cuando hago dieta no pierdo peso

Nueces

Son conocidas como una de las mejores fuentes dietéticas de ácidos grasos omega-3 antiinflamatorios, y han demostrado ser particularmente buenas para el corazón. A propósito, un estudio de Journal of the American College of Cardiology encontró que el consumo de nueces, una o más veces a la semana, se asocia con un riesgo hasta 19 % menor de enfermedad cardiovascular total y un 23 % menos de riesgo de enfermedad coronaria.

Las nueces son un buen refrigerio entre comidas, para contrarrestar el bajón de rendimiento en el teletrabajo. Foto: Christin Klose

Un nuevo estudio científico sugiere que un puñado de nueces contiene casi el doble de antioxidantes para combatir enfermedades que una cantidad equivalente de cualquier otra nuez.

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Tomate

Esta fruta pertenece a la familia de las solanáceas, y es muy rica en agua y aporta solo 20 calorías por cada 100 gramos. Además tiene alto contenido en vitaminas y minerales, como la vitamina C (26 mg por 100 gramos); y es rico en licopeno, una sustancia que junto con otros compuestos reduce el riesgo de contraer algunos tipos de cáncer.

El tomate ayuda a prevenir los derrames cerebrales, según un estudio

El tomate se lo puede consumir de varias formas.

El licopeno tiene propiedades antioxidantes. Es más, diferentes estudios han demostrado que al incorporarlo habitualmente en nuestra dieta disminuye el riesgo de desarrollar determinados tumores (próstata, páncreas, pulmón y colon). Al respecto, un estudio publicado recientemente mostró que los hombres que comen más de diez porciones a la semana de tomates tienen un riesgo 18 % menor de desarrollar cáncer de próstata.

Además, otro estudio mostró que una dieta rica en tomate puede ayudar a proteger a las mujeres posmenopáusicas del cáncer de mama al aumentar los niveles de adiponectina, una hormona involucrada en la regulación de los niveles de azúcar y grasa en la sangre.

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Huevos

Comer huevos junto con otros alimentos también puede ayudar a nuestros cuerpos a absorber más vitaminas. Es rico en proteínas esenciales y grasas saludables. Además, son fáciles de incorporar en la dieta, ya sea en el desayuno o en el almuerzo.

¿Cuán bueno para la salud es comer huevos?

Los huevos son un alimento que aporta colágeno. Imagen: Pexels

Hay que prestar atención al mito de que aumenta el colesterol de forma negativa, puesto que no existe un estudio oficial que muestre relación entre comer huevos y un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.

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Brócoli

De pocas calorías, sin embargo, es un alimento muy versátil. Es una verdura con una gran cantidad de vitamina C, B1, B2 y B6; y también aporta dosis sustanciosas de yodo, zinc, cobre y manganeso. Tiene mucho contenido en agua y mucha fibra, por lo que es ideal para una dieta en que se quiere mantener el peso bajo. Además contiene sustancias antioxidantes y se promueve su consumo para prevenir enfermedades como el cáncer.

El brócoli también puede actuar en el estómago como antibiótico y es capaz de disminuir la población de la bacteria 'Helicobacter pylori', una de las causantes de la úlcera de estómago.

El brócoli contiene ácido fólico y también destaca por su alto contenido en fibra. Otra de sus ventajas es que aporta pocas calorías y pocas grasas.

Además, el brócoli contiene glucosinolatos, que según investigaciones médicas pueden tener una acción beneficiosa a la hora de prevenir algunos tipos de cáncer (mama, pulmón, colon y útero).

Sardina

No solo las frutas y vegetales ayudan a nuestro cuerpo a la hora de perder peso, sino que también pescados como la sardina son fuente importante de vitaminas, proteínas y grasas buenas.

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Nutrientes como la taurina, el omega 3, el calcio y la vitamina D protegen ante la enfermedad, según investigadores de la Universidad Oberta de Cataluña.

Las sardinas están dentro del grupo de pescados azules, cuya característica es ser ricos en ácidos grasos omega-3 y disminuir el nivel de colesterol en la sangre, explica el portal El Universal.

En lo que respecta a las vitaminas, este pescado presenta un aporte interesante de vitaminas liposolubles D, E y A. Además, es un tipo de pescado azul que cumple un papel importante en la prevención de patologías cardiovasculares.

Mango

Desde el punto de vista nutricional, su contenido de agua es elevado (casi un 85 %). Aporta 14 gramos de carbohidratos por 100 gramos, y su aporte de grasa es prácticamente nulo. Además, el mango es abundante en fibras, por lo que mejora el tránsito intestinal.

El mango posee vitamina C, A y E, entre otras propiedades beneficiosas para el organismo. Imagen: Pixabay

Investigadores de la Universidad Estatal de San Diego señalaron que comer mango puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Esto tras un estudio a 27 adultos con sobrepeso y obesidad que consumieron, durante 12 semanas y de manera diaria, 100 calorías de mango fresco; y otros, galletas isocalóricas bajas en grasa en igual periodo. (I)