No es un tema común de conversación, hasta comentarlo se vuelve incómodo para quienes padecen de estreñimiento, un síntoma que se caracteriza por la disminución del número de deposiciones, o por la existencia de esfuerzo, dificultad y dolor para expulsar las heces.

Pese a que hablar de este trastorno digestivo resulta incómodo y para algunos hasta de mal gusto, es causa frecuente de consulta médica, pues “afecta a cerca del 30 % de la población. Es predominante en el sexo femenino, con una relación 2-3 por cada hombre y aumenta su presentación en edad avanzada, en personas de más de 60 años”, dice el gastroenterólogo y endoscopista digestivo Pablo Salgado.

¿Cómo una persona identifica que sufre de estreñimiento?, ¿se puede decir que lo padece la primera vez que tiene molestias para ir al baño?

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El estreñimiento se clasifica por el tiempo de origen de los síntomas: agudo o transitorio: de inicio repentino; y este concuerda con modificaciones en la dieta, enfermedades metabólicas (diabetes), neurológicas (infartos cerebrales), periodos de inmovilidad (cirugías o fracturas), y secundaria a efectos de algunos fármacos. Y crónico, cuando se presentan dos o más de los siguientes síntomas en más del 25 % de las deposiciones, los últimos tres meses: número de deposiciones menor a 3 por semana: esfuerzo excesivo en evacuar; heces duras y secas; sensación de evacuar de forma incompleta tras una deposición; sensación de obstrucción al querer hacer una deposición; necesidad de ayuda para hacer una deposición, uso de laxantes, supositorios, usar el dedo para extraer las heces.

¿Y puede haber algún tipo de complicaciones? ¿En qué momento una persona debe preocuparse por un estreñimiento crónico?

El estreñimiento crónico es molesto, ya que la persistencia de sus síntomas a largo plazo puede originar complicaciones, como hemorroides que es una inflamación de las venas del ano, estas se forman al hacer mucha fuerza para evacuar; el principal signo es la presencia de sangre roja generalmente al final de la deposición o al limpiarse, también produce dolor. Una fisura anal o ruptura de la piel del ano es otra consecuencia que provoca dolor al momento de defecar y en ocasiones produce sangrado limitado al paso de heces muy grandes o duras.

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Además puede causar impactación o retención fecal, es cuando las heces que no pueden eliminarse, debido a la acumulación de heces duras y en gran cantidad, que pueden provocar cuadros obstructivos intestinales; que de acuerdo con la severidad son de manejo hospitalario y multidisciplinario.

También están los divertículos del colon que son pequeñas bolsas en la pared del colon que aparecen por el aumento de presión en el interior de este órgano. Frecuentes en mujeres mayor de 60 años. Los divertículos generalmente no producen síntomas, pero en un pequeño porcentaje se pueden inflamar y en otros casos provocar sangrado.

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Existe un grupo de personas muy particular, con estreñimiento de reciente aparición, que se acompaña de ciertos síntomas que se consideran de preocupación o alarma, y requieren una valoración de especialidad urgente. Estos signos de alarma son distensión o dolor abdominal, que no mejoran; vómitos, sangrado rectal o sangrado en las heces abundante; pérdida de peso; en los adultos mayores con estreñimiento grave de nueva aparición. Los pacientes con estos signos de alarma deben realizarse una colonoscopia para realizar un diagnóstico pertinente de enfermedades del colon como es el cáncer de colon.

¿El estreñimiento es hereditario, congénito, da por malos hábitos...?

En la consulta es muy frecuente esta pregunta, ‘¿si mi mamá es estreñida, yo también lo seré?’, y la respuesta es no; el estreñimiento no es hereditario. No hay evidencia que demuestre una secuencia gen, pero existe un pequeño grupo en que ciertos cambios anatómicos del colon predisponen a ser estreñido, como el dolicocolon o megacolon. El dolicocolon es el alargamiento del colon más de lo normal, el cual es no es considerado una enfermedad, pero se asocia al estreñimiento. El megacolon es la dilatación del colon que se asocia trastornos del tránsito intestinal. Estas anomalías favorecen que se acumule un mayor volumen de heces y facilitan las fermentaciones, produciendo mayor gas y molestias digestivas.

Los malos hábitos sí son causa de estreñimiento. Hay varios estudios que han logrado identificar que personas dentro de un mismo entorno familiar lo que tienen con mucha frecuencia y comparten son los malos hábitos de alimentación, como la ingesta pobre de fibra, el incremento de alimentos ricos en grasas, el no tomar la cantidad suficiente de líquidos, el sedentarismo; lo que conlleva que algunas personas dentro de una familia presenten el estreñimiento.

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El gastroenterólogo Pablo Salgado explica los hábitos que se deben adoptar para evitar el estreñimiento. Foto Cortesía

¿Qué hábitos se deben adoptar para evitar el estreñimiento o superarlo?

Para tener una buena salud digestiva, es importante adquirir buenos hábitos de alimentación, hidratación y ejercicio; que son principales factores que influyen en la digestión y motilidad intestinal. Estas medidas permiten prevenir y tratar el estreñimiento.

Dentro de los hábitos por adoptar el especialista recomienda:

  • Ingerir alimentos ricos en fibra como: las frutas, las verduras, cereales y legumbres; estos actúan como laxantes naturales, ya que logran mantener un volumen y cantidad de líquidos adecuado de las heces, y mantiene una motilidad adecuada del colon. Se aconseja comer unos 30 g de fibra al día.
  • El beber como mínimo 2 litros de agua al día para mantener buena motilidad intestinal y mejora el volumen de las heces (evita que sean duras y secas); la toma de infusiones de ciertas plantas ayudarán, especialmente las de hojas de sen, lino o ruibarbo.
  • Ejercicios porque mejoran el metabolismo, aumenta el movimiento gastrointestinal, facilita la digestión y refuerza la musculatura accesoria del abdomen para ayudar a defecar. Recomiendo practicar durante 40 minutos entrenamiento aeróbico y ejercicios centrados en el abdomen unas tres veces a la semana, esto mejorará tu tránsito intestinal y reducirá el estreñimiento.
  • Escuchar el deseo fisiológico de defecar aparece cuando las heces ocupan el recto, lo que expresa el momento adecuado para ir al inodoro a realizar una deposición. Aconsejo sentarse y defecar a la misma hora del día, estar relajado y tranquilo, y no dejar pasar el deseo de defecar cuando este se tiene. Es muy importante tenerlo como un hábito regular, diario y brindar el tiempo necesario.

Hay muchos medicamentos que se ofrecen en el mercado para curar el estreñimiento e incluso algunos los usan como método para bajar de peso, ¿son efectivos?, ¿pueden causar efectos secundarios?

En el mercado existen varios tipos de laxantes que pueden ser adquiridos sin receta médica.

De estos medicamentos existen:

1. Laxantes formadores de masa: lubrifican y aumentan el tamaño de las heces, activando el movimiento intestinal.

2. Laxantes osmóticos: acumulan agua en el colon, lo que favorece a mantener buen volumen de las heces.

3. Laxantes lubricantes: los más conocidos son los enemas, que al introducirlos en el recto suavizan las heces y promueven su evacuación.

4. Laxantes estimulantes o irritantes: provocan el aumento del movimiento del colon, para desplazar las heces y facilitar su expulsión.

Cada uno de estos tipos de laxantes tiene su mecanismo de acción y su forma de presentación, pero lo que todos tienen como objetivo es mejorar el volumen de las heces y recuperar el ritmo intestinal normal.

Como método para bajar de peso, los laxantes no tienen una indicación médica, y debe evitarse su uso indiscriminado; ya que estos pueden provocar graves complicaciones como: deshidratación, trastornos hidroelectrolíticos (pérdida de electrolitos), desnutrición y carencias nutricionales.

Se conoce también que los laxantes interfieren en el proceso de absorción de otros medicamentos como los antibióticos, los anticoagulantes y fármacos para el corazón y huesos; por lo que al momento de tomarlos se debe conversar con su médico para evitar problemas en su salud.

Toda persona con estreñimiento crónico debe acudir a consulta con un especialista para tener una valoración clínica objetiva y tener un diagnóstico; ya que siempre se debe individualizar al paciente y proponer un tratamiento, cuyo objetivo es mejorar los síntomas, recuperar el ritmo intestinal y evitar las complicaciones (I).