La adopción animal es un proceso que con los años se ha vuelto más amigable y de fácil alcance. Hoy en día, existen en Ecuador varias organizaciones que se encuentran en redes sociales con el propósito de agilizar la adopción de perros y gatos, pues se promueve el darles un hogar responsable a aquellas mascotas de la calle, en lugar de comprarlos.

Adóptame Ecuador

Para romantizar esta causa, @adoptameecuador sube fotografías tiernas a su cuenta de Instagram, con un perfil detallado de cada candidato que incluye su nombre, personalidad, edad y gustos. Su fundadora, Patricia Isaías, comenta cómo funciona el proceso de adopción de estos cachorros a través de su plataforma.

Adóptame Ecuador no es una fundación animal: es una plataforma, un medio para que las personas se animen a adoptar a los perritos. “Trabajamos con rescatistas y fundaciones. Cuando llegan los perritos a sus centros, nosotros les hacemos sesión de fotos y chequeos médicos; luego publicamos sus fotos en las redes sociales y las personas aplican para adoptarlos”.

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Isaías cuenta que comenzaron a crecer trabajando con fotógrafos y desarrollando historias para cada perro. Es un proceso responsable y atractivo hecho para que las personas le den el mismo valor a una mascota adoptada que a una comprada. “Cada perrito que sale de aquí se va con hemograma al día, chequeo médico, carnet de vacuna y bañado. También trabajamos con entrenadores y veterinarios”, indica.

Adoptar un perro no es solamente un acto de amor, sino un acto de responsabilidad y compromiso. Es por eso que el proceso de selección de adoptantes dura un promedio de dos semanas. Su fundadora explica que, primero, las personas aplican vía Instagram y se les manda un formulario de 54 preguntas. “Luego de aprobar a quienes cumplan con el perfil ideal, procedemos a entrevistar a 20 de los candidatos y, finalmente, seleccionamos a la persona correcta”, sostiene.

Esta organización sin fines de lucro tiene alrededor de 40 adoptantes al mes: “Tratamos de encontrar hogares responsables. Hacemos los formularios para minimizar la subjetividad, cualquier tipo de parcialidad que haya en el sistema”.

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¿Qué pasa con las personas que aplican para un perro pero no son elegidas como sus adoptantes? Dos tercios de las personas que adoptan a través de Adóptame Ecuador se llevan a perros que nunca han sido publicados. “A los que no fueron seleccionados, les enviamos un PDF con todos los perros disponibles en adopción, para que no tengan que volver a pasar por el proceso de formulario, porque al final del día están en busca de uno”.

Si hay una devolución, por una razón de fuerza mayor, el perro vuelve donde los rescatistas o al refugio hasta hacerle de nuevo el chequeo médico y ponerlo en adopción. Pero si no es el caso, y solo se trata del comportamiento del perro, el centro ayuda al adoptante, ya que cuenta con entrenadores que los pueden auxiliar. Solo el 5 % de personas tiene quejas de su mascota, revela Isaías.

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Muchas personas también han recurrido a esta plataforma para buscar perros con características específicas. “Parte de nuestro proceso es emparejar a las personas con su perro ideal. Pero sí existen casos en los que intervenimos si no pensamos que es el tipo de perro adecuado para el humano. Por ejemplo, a una persona sedentaria no le vamos a dar un cachorro lleno de energía que necesite mucha actividad, deporte y caminata”, sustenta.

La página, que cuenta con más de 93.000 seguidores, suele recibir mensajes como “Queremos un pitbull” o “Estoy buscando un husky”, pero sus organizadores indican que así no funciona. “Nosotros ponemos en nuestras redes los perros que están abandonados en la calle. Entonces, por una parte, tratamos de encontrarles un perro que cumpla con lo que buscan y lo que les iría bien de acuerdo a su ambiente; pero, por otra parte, no podemos encontrarles la raza del perro perfecto que quieren”.

La adopción tiene un valor de $ 60 para cubrir las fotografías, alimento, vacunas, veterinario y al equipo detrás de Adóptame Ecuador.

Rescate Animal

Desde sus inicios en el 2011, la fundación Rescate Animal ha dado en adopación unos 1.900 animales, además de las 5.512 mascotas a las que han encontrado hogar de manera indirecta (a través de las redes sociales de la fundación o vía electrónica).

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Estefanía Pareja, vocera de la fundación, recuerda que la adopción es un acto de responsabilidad. “De nosotros depende esa vida”, enfatiza. Es por este motivo que recomienda que antes de adoptar se deben plantear las siguientes preguntas: ¿contaré con el presupuesto para darle lo que necesita?, ¿tengo el espacio adecuado en mi casa?, ¿voy a brindarle el cuidado y tiempo necesario para sus paseos? Estas y otras preguntas son importantes para tomar una decisión más allá de la novelería.

Explica que en Rescate Animal manejan dos filtros. En el primero se le pregunta a la persona interesada en adoptar si está de acuerdo con la esterilización. Si no está de acuerdo, pierde automáticamente su oportunidad de adoptar. “Así sea de la raza que sea, o si son cachorros, se firma un documento en donde el adoptante se compromete a esterilizarlo más adelante. Es la única forma de evitar que exista más sobrepoblación de animales en las calles”, explica.

Una vez aceptada esta condición, la persona accede al segundo filtro, que consiste en llenar un formulario donde ingresa sus datos personales, adjunta planilla de servicio básico, indica su lugar de residencia y otros datos. Cuando la mascota ya es entregada, la persona firma una hoja de compromiso en la que acepta cuidarlo y notificar a la fundación en el caso de que llegue a pasarle algo. Luego se hace un seguimiento por unos seis meses o un año de la mascota.

Pareja dice que los animales más difíciles para encontrarles un hogar son las hembras, tanto en gatos como perros, además de los gatos negros, los animales mestizos y los viejitos. “Los animales adultos y los adultos mayores tienen muchos beneficios en tema de adopción: son animales que no necesitan tanta actividad. Ya a esa edad saben dónde hacer sus necesidades; no hay que educarles en ese sentido; ya tienen un carácter marcado. Lo que sí necesitan es bastante atención, cariño, una buena alimentación y revisiones periódicas en su salud”, sostiene.

Aclara que la fundación no tiene un refugio, y que las mascotas están en custodia de hogares temporales o con algunos de los 50 voluntarios.

Una de las problemáticas que la vocera detecta en los más de 20 correos que reciben a diario es el abandono y maltrato animal. Dice que hay personas que escriben poniendo en adopción a sus mascotas por temas triviales, como cambio de casa, viaje o hasta divorcios. “Casos como estos lo que (evidencian) es que no existe un compromiso real en el momento de darse cuenta de que eres responsable de una vida”, expresa Pareja.

Las personas que quieran adoptar pueden revisar su cuenta de Instagram @rescateanimalec o escribir a la dirección de correo adopciones@rescateanimal.org.ec. Por estos canales también se publican casos externos y jornadas de adopción; además puede dar en adopción a mascotas.

Misión Rescate

Una iniciativa enfocada en la adopción de gatos es @Misionrescate, creada por la guayaquileña Sandra Alcívar, que acopla a más de 300 gatos de la ciudad. Entre ella y siete personas más se encargan de alimentar, cuidar y velar por el bienestar de una colonia que reside en un parque del sur de la ciudad. “Somos un grupo independiente que ayuda a la mayor cantidad de gatos posibles hasta que encuentren una casa”, manifiesta.

“Viven en el parque, pero lamentablemente no son las mejores condiciones. A veces padecen por las lluvias: no todos se pueden refugiar bajo un techo y les toca esconderse en los arbustos. Algunos se han enfermado gravemente y a otros no hemos podido salvarlos. En esta zona también hay atropellos, y es muy insegura e insanitaria para ellos”. Básicamente, este grupo los cuida hasta que, a través de sus redes sociales, encuentren adoptantes interesados en darles una mejor vida.

Su promotora inició este proyecto en 2018 y pone de sus ingresos para ayudar a los felinos. “Cada una (de las ocho del grupo) da una cuota mensual para poder mantener esta causa, pagarles a los cuidadores, comprarles medicina a los gatitos. Básicamente trabajamos para ellos, porque gran parte de nuestro sueldo se nos va en esto”.

La página de Instagram la crearon con el propósito de dar a conocer a los felinos miembros de la comunidad y que puedan hallar un hogar permanente. Para adoptar a estos gatos, no hay un formulario; más bien se debe escribir un mensaje privado a la cuenta y conversar con los encargados, quienes deciden finalmente los hogares de las mascotas.

La guayaquileña, de 48 años, invita a los amantes de los gatos a darles un hogar o, si no, a aportar un valor que la pueda ayudar a ella y su grupo a seguir sustentando a estos animales.

Refugio Pana

Kathiuska Delgado explica que en Refugio Pana también manejan un formulario de adopción responsable. Las adopciones también se pueden gestionar por mensaje directo a través de la cuenta de Instagram @fundacionrefugiopana, por donde también se le puede hacer llegar este formulario que brinda información oportuna que permite evaluar si la persona interesada está apta para adoptar.

En esta selección rigurosa nosotros constatamos si el animal va a tener un bienestar dentro de su nuevo hogar, si van a respetar la vida de este animal hasta el día de su muerte y si van a estar conscientes de que ellos necesitan ciertos cuidados pertinentes dentro del entorno familiar”, especifica Delgado.

A este proceso se suman dos entrevistas con la persona interesada en adoptar, y una visita para ver cómo se conecta con la mascota.

Delgado explica que, al tratarse de animales rescatados de estados muy vulnerables, deben estar seguros de que el adoptante acompañe a la mascota en los procesos de adaptación, aprendizaje, rehabilitación e integración. “Nosotros tomamos en cuenta que haya un deseo de adoptar, también el hecho de que muestre interés y respeto a la vida de ese animal, porque nosotros tenemos que recordar que un animal rescatado no es fácil de rehabilitarlo y de integrarlo a una familia”, señala.

También prefieren que los adoptantes tengan su casa propia, porque cuando se cambian los dejan abandonados. “A veces nos dicen que son muchos pasos, pero es necesario que la ciudadanía entienda que los procesos para adoptar tienen que ser rigurosos, porque ya hemos tenido experiencias muy malas (...). Nosotros tratamos de que el animalito que vaya a ser adoptado, por nuestra parte, de la fundación, vaya a un hogar que realmente lo ame, lo respete, desee que forme parte de su familia”.

En el 2022, Refugio Pana dio en adopción a aproximadamente 350 mascotas, entre perros y gatos. Y en todos los años de labor podría tratarse de unos 2.000 a 3.000 animales a los que les encontraron un hogar. “Cuando se los da en adopción se los da vacunados, desparasitados, esterilizados o con compromisos de esterilización; también se da una ficha médica”, indica.

Delgado indica que Ecuador vive una problemática social que va en aumento. “Solamente en Guayaquil existen más de 500.000 animales abandonados en las calles. En Ecuador la cifra es abismal”. Y por esta razón, la sociedad no debería ceder a gustos estéticos en el momento de decidir tener una mascota.

“El hecho de adoptar a un animal es la mejor opción para poder disminuir las cifras abismales de abondono. Porque, si existe una problemática, nosotros tenemos que sumarnos a la solución y no seguir siendo parte del problema. Por eso, adoptar es salvar, y comprar puede perjudicar muy gravemente”, defiende la joven rescatista. (I)