La transformación digital es un proceso del que actualmente ninguna empresa es ajena y, derivado de la llegada de la pandemia de COVID-19, se ha acelerado considerablemente desde 2020.

Existen estudios que señalan que, tras la llegada del virus a nivel global, el 8% de las empresas en el mundo detonaron su transformación digital y el 35% admiten que se vieron de alguna manera obligados a adoptar este enfoque.

Es decir, la pandemia de COVID-19 aceleró la transformación que millones de empresas pensaban dejar para otro momento. La necesidad de evolucionar y el cambio drástico en los paradigmas operacionales fue un factor que obligó a las compañías y gobiernos a establecer estrategias enfocadas en mejorar las operaciones diarias con ayuda de la tecnología.

Con eso en mente, el Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información presentó el año pasado la Agenda de Transformación Digital del Ecuador 2022-2025, una iniciativa que busca tener un impacto directo en la calidad de vida de las personas y generar cambios en materia operacional en las empresas del país.

Con este antecedente, la empresa Technology Evaluation Centers (TEC), especializada en consultoría y asesoría digital, afirma que esta es una agenda ambiciosa y coherente, pero que tiene tres principales desafíos que son clave para cumplir con los objetivos que se plantean:

Ampliar el acceso a la infraestructura digital

Es fundamental que las empresas y los entes de gobierno impulsen la penetración de internet y otras soluciones digitales en zonas en las que hay poco o ningún acceso a este tipo de recursos. De acuerdo con TEC, es fundamental que los organismos involucrados proporcionen herramientas y mecanismos digitales, así como regulaciones que permitan promover el crecimiento de la infraestructura tecnológica, tanto pública como privada.

De esa forma se podrá garantizar el acceso a más usuarios y colaboradores de las diversas industrias a más servicios digitales de alto nivel, fomentando además la educación con respecto al uso de esos recursos.

Promover una nueva cultura digital

Es importante señalar que la transformación digital no solo debe verse como la simple adquisición e implementación de soluciones tecnológicas. Se trata de la integración de tecnología para transformar los procesos y generar un cambio cultural que derive en prácticas que optimicen las operaciones diarias y mejoren los resultados.

Es por ello que las empresas deben saber que el análisis y la evaluación de todas las herramientas que estén considerando es fundamental para evitar implementaciones fallidas o que no se apeguen realmente a sus necesidades.

Por el contrario, un proceso de evaluación ayuda a las empresas a saber si es necesario actualizar o reemplazar los sistemas internos, así como definir qué tecnología se requiere y cuál es la mejor manera de integrar las nuevas soluciones con los sistemas existentes.

Garantizar los recursos para la ejecución digital

Si bien la iniciativa se enfoca en impulsar un cambio considerable, es importante mencionar que para que la industria del software y la tecnología crezca es necesario garantizar que se tengan los recursos técnicos y humanos suficientes para operar dichas herramientas.

Por lo tanto, los gobiernos y empresas deben impulsar la capacitación de cada vez más especialistas digitales para garantizar que se atienda la demanda digital y generar un verdadero cambio en materia tecnológica, optimizando las operaciones en las diversas industrias involucradas.(I)