Armar una PC gaming es la mejor opción para rentabilizar al máximo la inversión, adecuar el equipo a nuestras necesidades y lograr una computadora que no quede obsoleta en el corto plazo. Pero hacerlo no implica solo ponerle luces led y darle un look futurista; debe tener las partes adecuadas y pensadas para el uso que va a dársele. Por lo general, lo importante es que el equipo llegue por lo menos a la gama media.

Pero ya no es solo cuestión de preocuparse por las características que puedan hacer correr un juego con fluidez. Muchos gamers en la actualidad tienen que hacer más de una cosa a la vez y una de esas es transmitir sus jugadas.

El streaming se ha convertido en la nueva tendencia en los e-sports. Plataformas como Twitch, propiedad de Aamazon, para cierre de 2020 había incrementado más del 100 % sus ingresos y tenía un promedio de 2,2 millones de espectadores según datos de Esports Charts.

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Javier Concha, gerente de mercadeo de la marca Republic of Gamers de ASUS, comenta que hay ciertas características fundamentales que debe tener un computador para desenvolverse de una manera fluida durante la sesión de streaming.

En primer lugar está el procesador. Este es un punto vital en el desempeño gaming y la experiencia streaming. En el mercado hay disponibles muchos modelos para cada una de los componentes, por lo que el montaje de una computadora comienza por la comparación de cada uno ellos para analizar sus pros y contras.

Por ejemplo, si el usuario prevé actualizar su dispositivo con piezas más modernas durante su vida útil, es buena idea sobredimensionar este CPU de forma que sea compatible con componentes lanzados más adelante.

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Y es que el CPU suele considerarse el segundo más relevante en todo el ordenador, solo por detrás de la GPU (tarjeta de video).

Entonces, lo que se busca es un procesador con un buen rendimiento multinúcleo, es decir que sea de alto desempeño. Esto se puede conseguir a través de la serie H, ya sea Intel o AMD.

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Luego tenemos la memoria RAM que actúa como el cerebro del equipo y es quien carga las instrucciones que se dan al procesador. Para una experiencia streaming debe buscar una memoria RAM potente de mínimo 16GB.

Además, una tarjeta gráfica independiente del procesador también es crítica a la hora de mejorar la experiencia en streaming. Con una buena tarjeta gráfica podrá jugar y transmitir de manera fluida y tener una potencia extra para el software que hará la captura y transmisión, es decir programas como OBS o Wirecast por mencionar un par.

En el caso de NVIDIA, los gráficos GTX serie 16 y aquellos de la serie RTX cuentan con tecnologías que mejoran el rendimiento en OBS, una de las plataformas más populares, de forma tal que reduce la pérdida de FPS (frames per second) al hacer streaming y jugar de forma simultánea; al mismo tiempo (en el caso de RTX) mejoran la visibilidad de los textos en videojuegos de tipo Battle Royale.

“Estas mejoras por parte de NVIDIA son importantes, ya que antes se consideraba que para realizar un streaming de calidad era necesario contar con 2 portátiles, uno para jugar y el otro para realizar la transmisión”, afirma el experto de Asus.

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En cuanto a la visualización, se debe tener muy en cuenta el tema de la pantalla. Esta se encuentra valorada de acuerdo con su rapidez en términos de refresh rate (tasa de actualización). Es necesaria una pantalla con un mínimo de 120Hz para que los juegos se desempeñen de una manera más nítida y sin interrupciones.

Actualmente se ofrecen en el mercado pantallas hasta de 300Hz. Este tipo de pantallas son ideales para juegos FPS (first person shooter) ya que continuamente está cambiando el setting de nuestra pantalla.

Finalmente, hay que tener en cuenta la velocidad del internet y para esto tenemos dos opciones que dependen del equipo: si lo vamos a hacer por conexión cableada o vía wifi. En la actualidad, la conexión cableada sigue siendo la más rápida, pero si su preferencia es lo inalámbrico tendrá que asegurarse de que sus controladores le permitan una alta tasa de transferencia de datos. Con esto logrará no solo que la navegación online del juego sea óptima sino para que la transmisión no tenga retrasos y cortes intempestivos. (E)