En la actualidad, el día a día consiste es pasar de un dispostivo a otro. Desde la computadora para trabajar, el teléfono para comunicarnos y llegar a casa descansar viendo al televisor. En los últimos años, se ha incrementado el uso de la tecnología en la población mundial. El uso excesivo de dispositivos electrónicos ha provocado algunas consecuencias negativas en el bienestar emocional y vitalidad de los usuarios.

A escala global, cada persona pasa un promedio de 6 horas y 54 minutos conectada a internet, desde un teléfono, una computadora o tablet, según el portal de datos Statista. El uso de pantallas trae consigo dificultades para conciliar el sueño, inconvenientes para concentrarse, ansiedad, estrés y un estilo de vida sedentario.

Según el Informe ObservaPRL.org sobre Tecnoestrés, del Instituto de Seguridad y Bienestar Laboral, el 42% de los trabajadores considera que el uso excesivo de tecnología le genera consecuencias negativas, tanto a nivel personal como en la relación con su entorno.

Publicidad

En este sentido, Sarah Garcés, coach de salud y bienestar, sugiere ciertos consejos para que las personas puedan lograr un detox tecnológico efectivo.

  • Establecer horarios: el paso más difícil, pero el más importante es organizar el tiempo, para establecer límites.
  • Definir zonas libres de tecnología: es importante que las personas tengan espacios en sus hogares, donde puedan destinar tiempo a actividades que no impliquen el uso de dispositivos, como hacer ejercicio, meditar o leer.
  • Reconectarse con el mundo real: una de las claves para alcanzar una desconexión digital efectiva es planificar otras actividades y compartir tiempo con familia y amigos, a través de reuniones familiares, viajes a la naturaleza, salidas al parque o noches de juegos de mesa. (I)