Arqueólogos armados con drones han descubierto más de 25 nuevos geoglifos que fueron grabados en una franja del desierto costero en el sur de Perú cerca de las Líneas de Nazca, dijo el lunes un funcionario del Ministerio de Cultura.

La mayoría de los nuevos geoglifos, incluyendo figuras de una orca y una mujer bailando, parecen haber sido hechos por la cultura Paracas hace más de 2.000 años, cientos de años antes de que los habitantes de Nazca crearan dibujos gigantes similares cerca, dijo Johny Isla, arqueólogo que lidera los trabajos de conservación del ministerio de cultura en la región.

Otros 25 geoglifos que previamente habían sido localizados por residentes locales, también han sido mapeados con drones, agregó Isla.

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"La utilización de drones nos ha permitido ampliar esa documentación, descubrir nuevos grupos de figuras", afirmó Isla durante un recorrido por los geoglifos en la provincia de Palpa.

Pero a diferencia de los geoglifos de Nazca, la mayoría de las cuales solo se pueden ver volando sobre ellas, muchas de las líneas de Palpa fueron talladas en laderas y se pueden ver desde abajo, dijo el Ministerio de Cultura de Perú en un comunicado.

Los geoglifos creados por las culturas Nazca y Palpa son sorprendentes recordatorios de la rica historia precolombina del Perú y se consideran enigmas arqueológicos, ya que nadie sabe con certeza por qué fueron dibujados, tan grandes y durante tanto tiempo.

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"En total estamos hablando de 1.200 años de producción de figuras" en la región, precisó Isla.

Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994, las Líneas de Nazca han sufrido daños en el pasado por ocupantes ilegales y automovilistas.

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En 2014, el grupo ecologista Greenpeace se disculpó con Perú por organizar una protesta contra los combustibles sucios en el geoglifo del Colibrí de Nazca que, según funcionarios del gobierno, resultó parcialmente dañado.

Isla dijo que el incidente de Greenpeace provocó que el Ministerio de Cultura de Perú intensificara los esfuerzos para proteger los sitios arqueológicos en la región, ayudando a manejar los nuevos descubrimientos.

"Hasta ahora no hemos caminado sobre ellos, hemos tomado solo las fotos, es la primera etapa de investigación. Se va a procesar esas imágenes, después ir al terreno y ver materiales asociados para que nos ayuden a precisar su cronología", afirmó Isla. (I)