El nivel de Riesgo País no solo se mide en números. También hay otra metodología y en una escala de A a la E, Ecuador tiene una calificación no alentadora: C, expresado en el informe anual de la empresa de seguros de crédito Coface.

El Handbook de Riesgo País y Sectorial 2019 de esta firma analiza las cifras oficiales de cada país y presenta cada año su informe de 161 naciones.

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A más del riesgo país, se mide el riesgo sectorial de 13 sectores a nivel mundial. Es la vigésima tercera edición del manual. Y tiene una segunda calificación por país sobre el clima de los negocios. En este parámetro Ecuador sube a B.

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El país está en el mismo nivel –tanto a nivel de riesgo país como de clima de negocios– de Argentina y Bolivia. Mientras que Perú y Colombia van por delante, con A4.

En el continente Canadá y Estados Unidos están en la punta con las calificaciones más altas de A1 para clima de negocios y A2 en riesgo país.

La C que tiene Ecuador quiere decir que las perspectivas económicas y financieras son “muy inciertas. El contexto político podría ser inestable. El clima de negocios tiene deficiencias sustanciales. La probabilidad promedio de incumplimiento de la compañía es muy alta”.

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En la evaluación particular del país se considera que “el crecimiento permanece limitado por la disminución en el apoyo del sector público”. Además pronostica que el consumo de los hogares se mantendrá restringido.

Adrián Ordóñez, gerente de Coface, explica las dos razones principales por la calificación de Ecuador: el nivel de endeudamiento que tiene el Estado respecto al PIB y la capacidad de repago. Y el déficit fiscal.

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“La principal diferencia del riesgo país de Coface con el de JP Morgan, más allá que uno es numérico y otro es alfanumérico, es que el de JP Morgan tiene un gran componente de los mercados bursátiles, el nuestro no necesariamente tiene ese componente y tiende a ser una referencia más real para los países latinoamericanos, donde las bolsas de valores son muy incipientes...”. (I)