El rostro de la nueva vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, no podía mostrar más disgusto. Parecía que estuvo a punto de ni siquiera darle la mano a quien en un momento fue su sucesor en la primera magistratura: Mauricio Macri.

Mauricio Macri felicita en el nuevo cargo a Alberto Fernández.

Macri traspasó a su sucesor la banda y el bastón presidenciales, tras lo cual ambos se fundieron en un afectuoso abrazo mientras los asistentes a la ceremonia entonaban la marcha peronista.

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El abrazo entre Fernández y Macri fue una imagen inusual dadas las rispideces que ambos mantuvieron en los últimos tiempos y la acusación del peronista de que su antecesor le dejó un país con las variables económicas por el suelo.

Las imágenes captadas por las agencias de noticias son elocuentes.

Finalmente, La nueva vicepresidenta tuvo que recibir la felicitación de quien fue su sucesor hace cuatro años. (I)