Los activistas culturales partieron el 1 de diciembre desde la estación El Boliche, en Cotopaxi. No lo hicieron desde Chimbacalle, Pichincha, como lo tenían previsto, por una recomendación sanitaria ante los efectos del COVID-19.

"Porque los lugares del sur de Quito por donde pasábamos son un foco de infección, entonces nos dijeron que preferiblemente no lo hagamos", contó Fenando Freire, unas de las personas que integran el proyecto Bicitrén, cuyo objetivo inicial era trasladarse desde Quito hasta Durán, del 25 de noviembre al 14 de diciembre.

René Paredes, Fernando Freire, Leonardo González Arias y Bolívar Sánchez Flores avanzan por la ruta ferroviaria que hasta hace unos meses era usada por la Empresa Pública Ferrocarriles del Ecuador, entidad que entró en un proceso de liquidación ante la crisis económica, según el Gobierno.

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No obstante, hay iniciativas de alcaldías y prefecturas para asumir la administración de tramos de la línea férrea.

Un anhelo que tomó forma

Paredes y Freire tenían un anhelo en común: rendir un homenaje al ferrocarril, a Durán como cantón ferroviario, a la historia, a sus familiares que formaron parte de la institución pública que administró este sistema de transportación, como Víctor, padre de René, quien fue gerente por varias ocasiones; o Leonidas, padre de Fernando, fogonero (persona que alimenta el fuego de la locomotora).

"Algún día conversé con mi amigo Fernando y él tenía la idea de venir de Quito a Durán caminando, pero decíamos que a nuestra edad era difícil. Entre investigaciones, curioseando vi algo que hacen en Europa con la bicicleta en las rieles", contó a EL UNIVERSO -semanas atrás- Paredes, de 61 años, sobre el origen del proyecto.

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En estos doce días, los viajeros transitaron por varios pueblos y cantones, como Ambato, Riobamba, Cajabamba y Guamote. La travesía debía finalizar el 14 de diciembre, pero su llegada a Durán se extenderá un poco más, teniendo en cuenta que partieron con días de retraso por eventualidades e inconvenientes, como obstáculos en ciertos tramos de la línea férrea.

Bicitren boliche - Latacunga

Publicado por Fernando Freire Manzano en Martes, 1 de diciembre de 2020

En ciertos tramos, el espacio entre las rieles se ensanchan y eso ha dificultado el avance de los duraneños, quienes también se han enfrentado a grandes alturas. Sin embargo, esos obstáculos han sido opacados por el recibimiento y ayuda de lugareños, bomberos y policías. En algunos casos, familias les han ofrecido estadía y comida, como los Freire y los Vacacela Arias.

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Ellos esperan que esta travesía sirva para visibilizar el valor de mantener activa la línea férrea, por el turismo, la vida comercial de los pueblos y el patrimonio histórico del país. (I)