Incertidumbre en Sinaloa: los narcos destruyeron más de 200 cámaras de videovigilancia durante los primeros días de enero

Mazatlán y Culiacán (Sinaloa), han sido víctimas del crimen organizado a manos de sujetos a sueldo del narcotráfico. Según registros, los sicarios han destruido cerca de 206 cámaras de seguridad en distintos puntos de la ciudad.

Según las cifras, 172 fueron desactivadas en Culiacán, mientras que en Mazatlán fueron 34 equipos.

Uno de los hechos ocurrió en el bar Capital ubicado en la colonia Miguel Alemán, en Culiacán, donde los clientes vivieron momentos de terror por un tiroteo desatado en el lugar. Según los reportes, hombres armados abordo de camionetas llegaron al local y dispararon, desactivando a balazos las cámaras de videovigilancia de las zonas.

Horas después, el establecimiento se pronunció al respecto a través de un comunicado y aclararon que se trató de un ataque a las cámaras de videovigilancia. Más tarde en redes sociales circularon videos de presuntos pistoleros disparando a las cámaras de videovigilancia. La grabación fue tomada por un ciudadano que circulaba por la ciudad. Se presume que los hechos tuvieron lugar el pasado 31 de enero, en las fiestas decembrina, según recoge el portal de Infobae.

Se presume que los hechos tuvieron lugar el pasado 31 de enero, en las fiestas decembrina. Además han existido ataques a cámaras de vigilancia frente al Palacio Nacional, la zona ‘ La primavera’, el boulevard de las Torres, la calzada Aeropuerto, entre otros.

Otros puntos donde se disparó a las cámaras de seguridad fueron la avenida Álvaro Obregón y la calle Rosales y Obregón, cerca del primer cuatro de la ciudad. En la avenida Ángel Flores otra cámara fue destruida.

La situación empeora puesto que 'Los Chapitos', una célula criminal del Cártel de Sinaloa, impuso en esos días un toque de queda obligatorio, y a todos aquellos ciudadanos que salieran de sus casas o hicieran disparos al aire, los asesinarían. Esta práctica ya es considerada un delito federal.

De vez en cuando, las autoridades tienen que pedir por radio y redes sociales a sus habitantes que no salgan a la calle o viajen en coche por carretera debido a los enfrentamiento en plena calle que libran los elementos de seguridad y los sicarios.

La fragmentación interna del cártel también ha motivado que células delictivas se enfrenten. (I)