El obtener productos para el cuidado de su piel y rostro a bajo costo hizo que Paola Arroyo, una joven quiteña, se incline por el método de eco-cash.

Se trata de reciclar envases de perfumes vacíos, cremas, desodorantes, esmaltes e incluso de pasta dental para luego obtener un descuento en compras.

Este método lo aplican las marcas L’Occitane Cosmetic, Collage Cosmetic, Nuggela & Sulé, Jowaé, Zao, Cereria Molla 1899 y Nesti Dante, que pertenecen al Grupo BFS en Ecuador, una empresa de comercialización de productos de cuidado personal.

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Paola ha reciclado envases de cremas para el rostro, manos, champú y jabón. Lo hace dos veces al año.

“Tú llevas los envases vacíos y te dan $ 1 por cada envase, e incluso aceptan de otras marcas. Pero me parece interesante, porque podrían terminar en la basura y ahora pueden direccionar mejor el uso de esos envases”, apunta.

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Cada recipiente tiene un valor para aplicar el descuento que va desde $ 0,25 hasta $ 1,00. Por ejemplo: los envases de tamaño estándar de las marcas participantes tienen un valor de $ 1,00 cada uno, y si es de tamaño de viaje es de $ 0,50.

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También pueden ser productos de otras marcas y de cualquier tamaño. Estos recipientes tienen un valor de $ 0,25.

Solo hasta $ 10 se pueden reunir en envases vacíos, que son descontados de la compra directa en los locales de L’Occitane Cosmetic y Collage Cosmetic en Guayaquil y Quito, respectivamente.

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Los envases o productos deben estar vacíos. No importa si están rotos, empolvados o sin tapa.

Christian Jaramillo, brand manager de L’Occitane en Ecuador, cuenta que este mecanismo se viene aplicando desde julio de 2019 y que se detuvo por varios meses en el 2020, debido a la pandemia del COVID-19. Sin embargo, resalta que los resultados obtenidos han sido satisfactorios.

En 2019 recogieron 18 palés (plataformas rígidas portátiles) de envases. Quince fueron en Quito y tres en Guayaquil. Y en 2020, de enero a marzo y de junio a diciembre, fueron 24 palés.

“El eco-cash es una iniciativa desarrollada en Ecuador y nace de una directriz o lineamiento de la marca L’Occitane a nivel mundial, que tiene una clara acción y que la gente lo pueda palpar en cuanto acciones de reducción de desperdicios de plástico en el mundo”, menciona.

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Según Jaramillo, el propósito es que para el 2025 todas las tiendas de L’Occitane en el mundo, que son un poco más de 3.000, tengan el servicio de reciclaje de productos cosméticos.

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Actualmente, solo el 30% de todos los locales ofrece el método de eco-cash.

Jaramillo indica que se están planificando otros proyectos ligados a la responsabilidad ambiental de la compañía y piensan en un proyecto de reforestación.

“No lo vemos como un gasto, porque a la final es un beneficio que sale del presupuesto de márquetin. Vemos que está alineado a la filosofía de la empresa; a través de esas acciones, nuestra intención primordial es comunicar al consumidor de cosméticos que importan dos cosas: tratar de darle un doble uso a las cajas, envases y todo este material que tenemos en la casa (y con esta acción ya tenemos fuerte de reducción de basura); y la segunda es que incentivamos con este tipo de mecanismos desarrollar una cultura de reciclaje, de cuidado”, explica, y agrega que también es el ahorro que siente el ciudadano al adquirir un producto.

Ana Lucía Mendoza, de Guayaquil, no ha usado el eco-cash, pero sí sabía de este mecanismo. Ella está reuniendo envases, como de esmalte, labiales y otros.

“Como está la situación, todo ahorro que se pueda generar en una compra es aceptable”, señala. (I)