Las tres gasolineras más rentables de Petroecuador se vendieron en el 2017, durante el gobierno de Rafael Correa, a manos privadas. Se lo hizo a través de procesos que fueron conocidos de manera pública en los que resultaron ganadoras las empresas Discomtriz, Distripetrol y Elot Construcciones y Servicios. Estas empresas pagaron $ 21,7 millones por las tres emblemáticas estaciones de servicio. Hoy en día, en cambio, está pendiente la venta de al menos 45 estaciones de servicio ubicadas en frontera y que en 2012 fueron expropiadas a distribuidores privados, pero aún no hay mayores avances. En un dinámico y cambiante mercado, en estos años han ingresado varias marcas de comercializadoras y han salido otras. Petroecuador se ha reducido.

El secretario ejecutivo de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo (Camddepe), Oswaldo Erazo, recordó que las tres más rentables gasolineras de Petroecuador, dos ubicadas en Quito: en Amazonas y Eloy Alfaro y Ponceano; así como la que está a la salida del Puerto Marítimo de Guayaquil (en la av. 25 de Julio), ya se vendieron en el 2017. Las dos primeras se vendieron a Discomtriz, Distripetrol y la tercera, de Guayaquil, a Elot Construcciones y Servicios.

La gasolinera de Ponceano, en Quito, que antes pertenecía a Petroecuador ahora luce los colores de la comercializadora Gaspetrolium. Foto Cortesía Foto: El Universo

Sin embargo estas siguieron aún durante un tiempo perteneciendo a la comercializadora Petroecuador, pero como parte de la franquicia. Al cabo de estos años varias gasolineras privadas que pertenecían a la franquicia de Petroecuador han ido cambiando de comercializadoras. No fueron excepción las tres más grandes que ya en manos privadas pasaron a Shell (la de la Amazonas), Gaspetrolium (Ponceano) y Terpel (25 de Julio en Guayaquil).

Publicidad

La gasolinera de Guayaquil que queda a la salida del Puerto Martítimo pasó a ser parte de la comercializadora Terpel. Foto: Peter Tavra Foto: El Universo

En el gobierno de Guillermo Lasso, a través del decreto 095, que ahora ya está derogado, se estableció la necesidad de vender en 100 días las 45 gasolineras ubicadas en frontera a privados. En el decreto se indicaba que se iniciará “de manera prioritaria e inmediata la venta de todas las estaciones de servicio de la Empresa Pública de Hidrocarburos del Ecuador y revisar los contratos de distribución existente a fin de determinar su finalización”.

Este proceso significaba el regreso a manos privadas de las gasolineras de Petroecuador. Es que, según recuerda Erazo, en 2012 Correa decidió que Petroecuador comprara más de 40 gasolineras ubicadas especialmente en frontera a través de la declaración de utilidad pública. En ese momento consideraba que esto ayudaría a controlar el contrabando de combustibles en la frontera.

Sin embargo, apenas tres años después de tomada esta decisión, el gobierno de Correa debió recular. “He dado las órdenes de pensar cómo vender las gasolineras que tiene Petroecuador y las franquicias”. Esta disposición fue anunciada en octubre del 2015 por el presidente Rafael Correa, durante su enlace sabatino. Producto de este proceso las gasolineras que se vendieron fueron las más rentables, como ya se había mencionado.

Publicidad

Ahora, en el gobierno de Guillermo Lasso, el proceso de venta a privados aún no se concreta, y está en una etapa de valoración de las gasolineras.

De acuerdo con Erazo, el mercado de las comercializadoras es dinámico. Así varias gasolineras han migrado de comercializadoras. Explica que Mobil ha salido del país, al igual que Repsol y en cambio han entrado y han crecido Primax, Terpel, Petróleos y Servicios y Shell. Asegura que en los próximos días entrará otra nueva denominada Gold. Esta se inaugurará en Riobamba e irá abriendo otras de a poco. En cambio, la franquicia de Petroecuador tiene una tendencia a un decrecimiento marcado.

Publicidad

En estos días han circulado informaciones sobre que la venta de la gasolinera de la Amazonas y Eloy Alfaro habría sido realizada por el actual régimen con supuestas ganancias millonarias para personas allegadas al Gobierno. Sin embargo, estas aseveraciones están alejadas de los hechos al analizarlos de manera cronológica.

El asambleísta Luis Almeida (PSC) denunció que Aparicio Caicedo, consejero del Gobierno de Lasso, ganó $ 5 millones por vender las estaciones gasolineras de Petroecuador, una de ellas ubicada en la Amazonas y Eloy Alfaro en Quito que es la que ya vendió la estatal petrolera a la empresa privada en el 2017 durante el gobierno de Correa. Su denuncia la realizó en una entrevista a Radio Pichincha, medio que pertenece a la Prefectura manejada por Paola Pabón. (I)