La erosión regresiva, fenómeno natural que se extiende por los ríos Coca, Quijos y Piedra Fina, en el sector de El Reventador (Napo), y que amenaza al complejo estratégico del sector (oleoductos, carretera Quito-Lago Agrio y Coca Codo Sinclair), le representa una millonaria caída de ingresos y más gastos al país.

Apenas se están calculando los impactos, pero lo que se sabe es que la cifra producto de la caída de la producción petrolera, baja de exportaciones y costos de volver a poner en marcha los pozos apagados superaría los $ 600 millones. Solamente para el presupuesto del 2022 habría una reducción de entre $ 250 millones y $ 350 millones.

Esto sin contar con los gastos en los que hasta ahora se ha incurrido por las siete variantes construidas para mantener en funcionamiento el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y el poliducto Lago Agrio Quito (unos $ 16,2 millones) y los gastos desde el sector privado con nueve variantes del OCP (que llega a $ 31 millones). A esto se debe sumar el costo de las variantes que se hicieron para garantizar el paso hacia Sucumbíos y que ahora se ha perdido. Otros costos adicionales tienen que ver con las obras de mitigación del fenómeno para proteger a las obras de captación de Coca Codo Sinclair.

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De acuerdo con el Ministerio de Economía y Finanzas, la disrupción (suspensión inesperada) en el bombeo de crudo ecuatoriano a través del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) tendrá un costo de unos $ 600 millones entre diciembre de 2021 y abril de 2022.

Considera que habrá una caída de casi 90 % en la producción petrolera del país, lo cual resultará en menores exportaciones de crudo ecuatoriano e importaciones adicionales de derivados. Finanzas dijo que de cumplirse el cronograma de obras propuesto por el Ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables, las exportaciones caerían en unos $ 500 millones, con impacto más marcado en diciembre del 2021.

Complementariamente, se estima que se deberán importar unos $ 80 millones adicionales en combustibles refinados y otros derivados para satisfacer la demanda doméstica. Además, el proceso de reacondicionamiento de pozos cuyas operaciones se suspendan durante la disrupción ascendería a casi $ 20 millones.

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Con menor producción, menores ventas externas y mayores importaciones de derivados, habría un impacto tanto en el crecimiento como en las cuentas fiscales. Por el lado de la actividad podría registrarse una disminución del crecimiento esperado en 0,3 % o 0,5 %, entre 2021 y 2022.

Mientras tanto, el presupuesto general del Estado podría ver ingresos menores entre $ 250 millones y $ 350 millones, mientras que el resto del efecto lo percibirán el Ministerio de Energía y EP Petroecuador. Este impacto se registraría mayormente en 2022, cuando la caída de las ventas de crudo se refleje en menores ingresos fiscales, dice Finanzas.

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OCP y Petroecuador han estado trabajando, después de la rotura de los ductos producida en abril del 2020 y las consecuentes pérdidas económicas y ambientales, en soluciones temporales para que no ocurra algo parecido. Ahora las nuevas variantes se ubican a media ladera. A 400 metros de la erosión, montaña arriba.

El OCP trabaja al momento en la novena variante a media ladera, a fin de restablecer el servicio de bombeo a principios de enero. Cortesía OCP Foto: El Universo

Roberto Grijalva, vocero de la empresa privada OCP, que maneja el Oleoducto de Crudos Pesado en Ecuador, explicó que hasta el momento la empresa ha construido ocho bypass temporales y dos variantes definitivas. Solo los trabajos en OCP han requerido una inversión que supera al momento los $ 31 millones entre los costos de construcción, estudios de diversa índole que se han realizado y monitoreos constantes para ir tomando decisiones preventivas.

Al ser consultado sobre si la novena variante que realizan podría ser ya una solución definitiva, explicó que la situación en el sector del río Quijos “no tiene precedentes que puedan determinar o predecir qué efectos tendrá a futuro”. Agregó que tanto las empresas públicas como privadas que operan en el sector han invertido importantes sumas de dinero en estudios en la zona y se ha contado con los más connotados especialistas del mundo para evaluar las condiciones.

Considera que para establecer una solución definitiva directa se requieren estudios y un análisis detenido de las mejores alternativas, proceso que toma tiempo realizar. “La erosión, al ser un fenómeno natural, genera eventos inesperados que requieren que tomemos decisiones inmediatas que permitan evitar una afectación ambiental y una parada de servicio”, dijo

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Agregó que se encuentran trabajando arduamente para restablecer el servicio y el compromiso sería reanudar la primera semana de enero del 2022.

Trabajadores del OCP trabajan al momento en la novena variante a media ladera, a fin de restablecer el servicio. La empresa ha invertido $ 31 millones al momento en estas soluciones. Cortesía OCP Foto: El Universo

Entre tanto, Petroecuador informó que hasta el momento han debido construir siete variantes del SOTE y cinco del poliducto a un costo de $ 16,2 millones. La séptima variante ya se ubica en las faldas de El Reventador, lo que se considera tierra más firme, explicó la empresa. La solución estaría lista para el 29 de diciembre.

Se evalúa uso del OTA colombiano

El Ministerio de Economía y Finanzas dijo que se está tomando una serie de medidas que permitirán mitigar los efectos tanto técnicos como económicos de esta disrupción. Por un lado, se está evaluando usar el sistema de oleoductos colombiano (OTA) para transportar parte de la producción doméstica.

En esta misma línea se está trabajando en adelantar rondas de licitación de operaciones de campos en 2022, lo que podría elevar la producción por sobre el nivel actual de manera permanente. Estas dos medidas compensarían parte de la caída en producción de los primeros meses del año. “Mientras tanto, por el lado de los ingresos fiscales, estamos trabajando en potenciar las medidas de eficiencia de recaudación, que este año ya han permitido mejorar la recaudación frente a lo presupuestado”, dijo esa cartera de Estado. (I)