Con dos golpes de timón inicia su gestión Ítalo Cedeño, gerente de Petroecuador, frente a la petrolera estatal. En primer lugar puso distancia en la iniciativa de dar en concesión campos y refinerías a la empresa privada, y más bien apuesta por los contratos de participación o joint venture para que de esta manera Petroecuador no deje de ser parte del proceso de producción. Adicionalmente, mostró su respaldo a la producción local de gas, al indicar que se impulsarán rondas off shore, no solo en Campo Amistad, sino en su entorno (en el litoral y el litoral costa afuera); así también anunció que buscará procesar el gas asociado que se quema en mecheros en la Amazonía. Según sus cálculos, actualmente estaríamos quemando unos 110 millones de pies cúbicos de gas en las teas.

De otro lado, anunció que para mayo se obtendría la primera producción de crudo en Ishpingo.

Estas fueron las principales novedades de la rueda de prensa brindada esta mañana ante los medios de comunicación. Cedeño, con cuarenta años de experiencia en la industria petrolera, informó que para ello al menos 22 campos en producción de Petroecuador han sido entregados al Ministerio de Energía, a fin de que puedan ser ofertados en rondas petroleras en esta figura de participación (joint venture).

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Sobre los concursos para concesión del campo Sacha y la Refinería de Esmeraldas, aseguró que aún se está analizando, pues “más que concesión debería ser un joint venture”. Dijo que en estos dos procesos van a trabajar de la mano con el Ministerio para maximizar el beneficio para el Estado.

Estas asociaciones o consorcios son parte del plan para ir incrementando la producción, que sí llegará a 1 millón de barriles diarios en cinco años, pero tomando en cuenta también la producción gasífera local, a la que también le va a dar apertura. Explicó que Ecuador tiene potencial gasífero y que no es posible que Colombia, con menores recursos petroleros, produzca unos 800 millones de pies cúbicos diarios, mientras el Ecuador, apenas 25 millones.

Actualmente, con los recursos financieros de los que dispone la empresa, la meta sería llegar a una producción total de 425.000 a finales del 2022. Sin embargo, considera que esta cifra podría ser mucho mayor si se aplica el plan previsto, que incluye la participación de la empresa privada con su inversión y tecnología de punta. “El límite es el cielo”, aseguró.

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Sobre el gas, el gerente Cedeño dijo que también se buscará aprovechar la generación de gas que actualmente se quema en teas. Se lo llevará a la planta de GLP de Shushufindi, que ahora no está trabajando a su máxima capacidad. Todo esto, con la participación de la empresa privada. Para Cedeño, es importante que se pueda bajar el nivel de GLP importado, pues es una salida de divisas importante que además requiere de un alto subsidio.

El plan definitivo estará listo en un mes, y se lo presentará al presidente de la República y al ministro de Energía. Para Cedeño es importante realizar un incremento agresivo de la producción, pues este es el momento para obtenerlo, más tarde ya no será posible por el cambio a energía renovable que vive el mundo.

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El gerente también prevé que se pueda convertir a la empresa estatal en una sociedad anónima, y así como se hizo con Ecopetrol, poder vender acciones y obtener recursos para la empresa.