El ministro de Energía, Fernando Santos Alvite, explicó que un concurso vía licitación es la salida correcta y legal para el tema del manejo de los campos 16 y 67 (ahora en manos de New Stratus, Petrolia), los cuales en tres semanas pasarán nuevamente a manos del Estado, según reza el contrato. Por lo tanto, se ratificó en que toda la inversión extranjera es bienvenida, pero a través de un proceso en el cual primen la transparencia y la competencia sana.

Así se pronunció el ministro en una entrevista con Ecuadorradio, en la cual respondió diversas preguntas sobre la hoja de ruta de su gestión. Sus declaraciones sobre el caso de los campos 16 y 67 se producen luego que el lunes 5 de diciembre se conociera que New Stratus, dueña de Petrolia, anunció su intención de ir a un arbitraje internacional, debido a que considera que ha habido incumplimiento de contrato por parte del Gobierno ecuatoriano.

Santos recordó que el campo 16 ha estado en manos privadas durante 40 años y que es tiempo de que retorne al Estado porque así lo dice el contrato. Confirmó que el viernes pasado hubo una reunión en Carondelet con los principales personeros de New Stratus. En ese momento, el presidente de la República, Guillermo Lasso, les había explicado que “en esos campos existe un activo de $ 2.000 millones que pasará gratis al Estado en tres semanas”. Además les había dicho que las empresas que estén interesadas en invertir e incrementar la producción son bienvenidas; pero que esto se realizará a través de una licitación. “Esto no les gustó”, comentó el ministro.

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Sin embargo, Santos explicó la postura del Ecuador cuando en tono coloquial se preguntó: “¿Cómo se va a dar a dedo $ 2.000 millones a un grupo de señores, por más simpáticos que sean?”. Además dijo que por transparencia y por ética el tema debe manejarse a través de una licitación.

Efectivamente, el contrato con Repsol fenece legalmente el 31 de diciembre del 2022. Y los activos, tanto de superficie como las reservas y la producción (que actualmente asciende a 15.000 barriles diarios), deberán revertirse al Estado. Sin embargo, la pretensión de Petrolia, amparada –según han dicho sus ejecutivos– en una cláusula del contrato, era de que se les amplíe y migre el contrato, pues aseguraban que una solicitud de este tipo se podía hacer en cualquier momento antes de que se revirtiera el contrato. Sin embargo, el ministro había explicado que para una renegociación prolija, una ampliación de contrato se debe realizar con un tiempo previo de al menos dos años.

De otro lado, varios portales de noticias internacionales han venido reportando una fuerte caída de las acciones de New Stratus en la bolsa. Según Proactive, hubo un colapso de las acciones en 71 % luego que el Gobierno ecuatoriano dijera que no tiene la intención de extender los contratos de dos bloques, 16 y 67, en la provincia de Orellana, que en conjunto producen 15.000 barriles de petróleo por día.

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Según Proactive, los contratos actuales vencen este mes y la empresa estaba tratando de extenderlos por 15 años, pero ahora el grupo busca llevar la disputa a un arbitraje internacional. La petrolera ha indicado que el arbitraje daría como resultado una dilución de efectivo mínima para los accionistas y pronosticó que terminaría el 2022 con 30 centavos de dólar canadiense por acción en efectivo y cuentas por cobrar a corto plazo. New Stratus indicó que mantendría una alianza estratégica con Baker Hughes que, en el corto plazo, se traducirá en nuevas oportunidades de negocios fuera de Ecuador.

Entre tanto, la nacionalidad waorani, que en 2020 se había opuesto a la entrada de New Stratus que llegaba a reemplazar a Repsol, ahora ha hecho peticiones directas al ministerio de que continúe la empresa canadiense al mando de esos bloques. En una visita que hizo la agencia de noticias EFE a la Amazonía, se ha indicado que los líderes waoranis no rechazan la explotación petrolera. Visitaron la escuela de Guiyero, donde se encuentran unas “piscigranjas”. Este es uno de los proyectos productivos puestos en marcha con capital de la empresa para proveer a las comunidades de alternativas de desarrollo sostenibles adaptadas a las condiciones del lugar. En ellas, cuenta la agencia, hay entre 4.000 y 5.000 cachamas rojas (Piaractus brachypomus), un pez oriundo de la zona, de los que hoy han salido decenas de ejemplares para la fiesta de una de las comunidades vecinas. Con iniciativas como esta se han creado 120 fuentes de empleo tanto directo como indirecto, señaló a EFE el jefe de Relaciones con Socios y Comunidades de Petrolia, Héctor Reinoso.

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Petrolia había prometido a las comunidades que podrían ser parte de los dividendos una vez que se firmara el contrato extendido. Por ello, en estos días hay incertidumbre en las comunidades, relató la agencia española. (I)