El sector exportador ecuatoriano pidió ser tomado en cuenta en el proceso de mesas de diálogo entre el sector indígena y el Gobierno, que empezarán a desarrollarse este miércoles, 13 de julio del 2022. Habiendo sido uno de los sectores más golpeados por la paralización de 18 días en junio, periodo en el cual se generaron pérdidas por no menos de $ 100 millones, con una afectación muy pronunciada en más de 800 empresas exportadoras, el gremio considera que tienen varios temas que aportar. El pedido se hizo público este martes en una rueda de prensa en la cual estuvieron varios representantes del gremio.

Felipe Ribadeneira, presidente del directorio de la Federación de Exportadores (Fedexpor), lamentó que, a pesar de haber realizado un pedido directo a los ministerios del sector productivo encargados de varios temas, no han recibido una respuesta. Considera que la sociedad en conjunto debe participar en el debate y, por ahora, se sienten excluidos de este tema tan importante.

Sin embargo, dijeron que aún existe tiempo para que se los pueda involucrar. Aseguró que, en conversaciones con el prefecto de Cotopaxi, han coincidido en que es importante la presencia del sector productivo, sobre todo porque en este sector está el compromiso de producir, de atraer inversión y divisas.

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El representante gremial explicó que en la agenda del sector indígena está el punto tres, en el que indican que no deberá haber más acuerdos comerciales. Para Ribadeneira este es un enunciado ideológico y lírico, que no considera que entre los mayores beneficiados por este tipo de acuerdos están los productos orgánicos, agrícolas, de los sectores rurales del Ecuador.

Efectivamente, el punto tres de la carta de demandas que hizo el sector indígena dice textualmente: “Se requieren precios justos en los productos del campo en las tres regiones del país, subsidio agrícola y no firmas de TLC, que destruyen la producción nacional”.

Para Ribadeneira, los acuerdos comerciales son necesarios para mejorar la competitividad de los productos ecuatorianos. Rechazarlos sería ir en contra del progreso de las mismas bases. Recordó que, cuando se iba a firmar el acuerdo con la Unión Europea (UE), pensaban que iba a ser perjudicial. Sin embargo, los hechos demuestran que, tras cinco años de la firma, ha habido nuevas exportaciones por $ 600 millones, 30.000 nuevas plazas de empleo y 600 productos nuevos de exportación.

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Comentó que, de todo el mercado exportador, un 30 % proviene de la economía popular y solidaria, que tiene que ver con comercio justo, mercado étnico y orgánico. El 75 % de la exportación de este tipo de productos va a Europa.

Alejandro Martínez, de Expoflores, también pidió que se permita al sector productivo ser parte del proceso. Comentó que es importante tener en la mira los grandes objetivos de la economía, que son ser más competitivos y generar mejores y más productos para levantar la economía. Recordó que Ecuador es una economía dolarizada y necesita que lleguen dólares frescos, tanto a través de la exportación como de las inversiones. Ninguno de los dos temas se está promoviendo en la situación actual.

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Sagrario Angulo, representante de Camari y el Fondo Ecuatoriano Populorum Progressio (FEPP), entidad de comercio justo y que exporta productos al exterior, explicó que en su sector también están interesados en participar en las mesas de diálogo. Recordó que ellos trabajan bajo estándares y principios de comercio justo, de tener relaciones fraternas, de cuidado del medioambiente, de reconocimiento del trabajo de la mujer: “Debemos estar presentes en estas mesas de trabajo, porque conocemos la situación”, dijo Angulo.

Finalmente, de acuerdo con Xavier Rosero, vicepresidente de Fedexpor, el crecimiento de las exportaciones en el primer quimestre fue mayor al 26 %; sin embargo, hay varios problemas que llevarían esta buena tendencia a la baja. El paro sí generará problemas, pues ya se empezarán a ver las pérdidas totales en junio. En cuanto a temas internacionales, la guerra de Rusia con Ucrania y otros temas geopolíticos han generado una apreciación del dólar que para Ecuador es perjudicial en sus exportaciones, pues lo vuelve menos competitivo.

Los exportadores temen que este año se registrará una desaceleración del crecimiento, el cual ya no crecerá en dos dígitos, como estaba previsto, sino solo en un dígito. (I)