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UNA constató que 55.000 quintales de arroz no estaban en la bodega que contrató para almacenarlos en el 2019

Tras 2 años de intentos sin éxito, el 18 de octubre pasado, las autoridades lograron ingresar a las bodegas con una orden judicial

DAULE, Guayas. El personal de la UNA constató que en la bodega ubicada en la dirección que consta en el contrato de almacenamiento no estaban los 55.000 quintales de arroz que se almacenaron en el 2019. Foto: Ronald Cedeño

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Los 55.000 quintales de arroz que debían estar embodegados en una piladora del cantón Daule (Guayas), y que son parte del inventario de la Unidad Nacional de Almacenamiento (UNA-EP) en liquidación, no fueron hallados en esas instalaciones.

Así lo informó este lunes el liquidador de la entidad, Luis Hernández, a Diario EL UNIVERSO después que lograron ingresar, con una orden judicial, a los predios para constatar la falta de la gramínea.

Unidad Nacional de Almacenamiento deja en inventario 55.000 quintales de arroz que aún no puede constatar

Esos 55.000 quintales, que equivalen a $ 1,8 millones, son la reserva alimentaria del país, que en una emergencia alimentaria se debería liberar para suplir el déficit alimenticio.

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“Ese procedimiento ya se efectuó el día 18 de octubre a las 16:50 en compañía con el señor fiscal y elementos de la Policía Nacional. No se encontraron los quintales de arroz en las bodegas donde establece el contrato. Conozco que la Fiscalía ha iniciado un proceso en contra del señor (Isidoro) Martínez”, sostuvo el liquidador.

Martínez es el representante de la empresa Carozeli, con la que la UNA firmó un contrato de almacenamiento el 28 de noviembre de 2019 por $ 140.692 para 365 días.

Desde el 2020, las autoridades de la UNA no pudieron ingresar a constatar si el producto estaba en las instalaciones que detalla el contrato.

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Hernández recordó que, tras el inicio de la pandemia y del proceso de liquidación de la Unidad, decretado por el presidente Lenín Moreno, y en el transcurso de dos años, no se pudo verificar.

La última contestación fue el 11 de octubre, en la que Hernández asegura que para recibirlos le pidieron el listado de las personas que irían con 48 horas de anticipación, cuando al día siguiente terminaba el último plazo dado en el Decreto 492 para la liquidación de la UNA. El 12 de octubre acudió un equipo del Ministerio de Agricultura y de UNA sin éxito.

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En tanto, en la Superintendencia de Compañías se registra que en junio pasado se dio el cambio de domicilio de Carozeli a Samborondón. Se incluye la observación de que “se cambió la dirección legal y no la postal, por lo que no adjunto el formulario de dirección domiciliaria, deberán realizar el proceso de actualización de datos con el usuario y contraseña del representante legal para que puedan obtener la dirección postal correcta”.

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Ahora la UNA está depurando la matriz de bienes y trabajando con el Ministerio de Agricultura. El lunes 17 de octubre se tenía previsto empezar mesas de trabajo con esa cartera de Estado para subsanar cualquier novedad, pues tenían diez días desde el 12 de octubre para concretar el traspaso de activos y pasivos.

Sin embargo, este lunes 31 de octubre se conoció extraoficialmente que el traspaso aún no se ha efectivizado, debido a que la escritura en la que se debe especificar lo que se traspasa y el estado en el que se traspasa de la UNA al MAG aún no estaría lista por parte de la UNA. (I)

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