Municipio de Quito dejó de enviar líquido contaminante del relleno sanitario El Inga a la Amazonía. Como medida de emergencia construye nuevas piscinas de almacenamiento

La Empresa Metropolitana de Gestión de Residuos Sólidos de Quito (Emgirs) informó que se suspendió el envío de tanqueros con los lixiviados (líquido tóxico que sale de la descomposición de la basura) que eran transportados a la Joya de los Sachas, provincia de Orellana para que un gestor ambiental les de tratamiento.

Esto, después de que la concejala Paulina Izurieta publicó videos sobre varios automotores que estaban sacando los lixiviados acumulados en el relleno sanitario El Inga, ubicado en Pifo, al nororiente de Quito y ante los reclamos de los habitantes de la población amazónica.

Maricruz Hernández, gerenta de Emgirs, señaló a este Diario que la medida fue tomada por la empresa Green Globe que se encargaba de tratar los líquidos contaminantes desde enero de este año. El contrato firmado por $ 4′098.950 estipula que en 820 días se iban a tratar 182.000 metros cúbicos de lixiviado acumulado.

La empresa instaló su planta dentro del relleno sanitario. Según la gerenta, en el plan piloto hicieron pruebas y sí cumplían con los estándares del Ministerio de Ambiente Agua y Transición Ecológica (Maate). Es decir, que el agua llegue a niveles libres de contaminación, ubicado en un grado de tabla 9 (mientras el número es menor, el agua tiene mayor contaminación).

Sin embargo, Hernández enfatizó que la empresa presentó problemas en su producción, los filtros se tapaban y tenían que detener sus operaciones. Es ahí que a costo de Green Globe se contrató a la empresa PECS, en la Amazonía para que traslade y trate estos lixiviados.

La gerenta señaló que desconoce el costo que significaba para la empresa privada, así como la cantidad de líquido transportado. Lo que sí verificaron fue que este gestor tenga licencia ambiental. También puntualizó que alrededor de 10 días realizaron este transporte con tanqueros y que el día que se trasladaron más fueron 12 camiones, aunque hubo días que solo fueron cuatro.

Se politizó el tema y le hicieron un flaco favor a la ciudad porque se paró una gestión que es totalmente reconocida por la autoridad ambiental, no estamos haciendo nada ilegal. Se está utilizando los servicios de un gestor autorizado para que trate los desechos y también están autorizados para el traslado.

Maricruz Hernández, gerenta de Emgirs

Actualmente dijo que ya han tomado medidas de contingencia, su solución será aumentar la capacidad de almacenamiento. Tendrán que construir más piscinas para que se dispongan los lixiviados, “obviamente nos ponen en dificultades porque los espacios se van reduciendo”, añadió.

La autoridad de Emgirs señaló que estas medidas se tomarán hasta que la empresa Green Globe recupere su operatividad al 100 %. Además, analizan la posibilidad de enviar a otro gestor externo o contratar a una nueva empresa que pueda manejar los lixiviados dentro del mismo relleno.

En el relleno sanitario ya tendrían construida una piscina con la capacidad de almacenar estos líquidos tóxicos por un mes. Durante este tiempo construirán cinco piscinas más que, según la gerenta, no significará un nuevo gasto porque será realizado por la misma empresa municipal, dentro de los presupuestos de operación.

Derrames en el relleno

La gerenta aceptó que el 10 de marzo pasado existió un derrame de lixiviados, pero aseguró que no llegó hasta el río porque la cantidad que salió de la piscina fue de cuatro metros cúbicos y que el percance fue reportado al Maate.

La cartera de Estado solicitó que Emgirs presente un plan de acción para atender esta piscina, el mismo ya fue enviado y esperan su aprobación. Sin embargo, como medidas tomadas durante el derrame, Hernández puntualizó que han bajado el nivel de la piscina nueve (la del derrame) y destinando lixiviados a otras piscinas que corran menor riesgo.

También acotó que este desbordamiento no significará una nueva multa porque en esta ocasión se reportó a la autoridad correspondiente y se tomaron medidas.

Sobre la multa de $ 127.500 que emitió el Ministerio de Ambiente a esta empresa municipal el pasado 28 de enero, por infracción ambiental, la gerenta respondió que el 7 de febrero presentaron un recurso extraordinario de revisión que fue negado. Después, el 11 de febrero ingresaron una apelación y este recurso fue aceptado a trámite. Hasta que exista una respuesta, argumentó que no se ha realizado ningún desembolso de la multa. (I)