En el monitoreo que realiza el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG) a los principales volcanes activos del Ecuador encontró anomalías en el volcán Sangay, ubicado en la provincia de Morona Santiago.

Las cámaras de vigilancia registraron una nube de gases y ceniza de 1.700 metros sobre el nivel del cráter que se desprendió en sentido norte y suroeste. Este hecho afectaría a las provincias de Chimborazo, Morona Santiago y Cañar en sus diferentes poblaciones aledañas.

Cierres viales en Quito este jueves, 18 de mayo

Desde las 08:00 de este jueves 18 de mayo, el IG mantiene un estudio activo del volcán y logró indentificar cuando la columna se desprendió de la cumbre, llevando una carga moderada de ceniza .

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La Secretaría de Gestión de Riesgos alertó a la comunidad de los sectos afectados para que tomen en cuenta la alerta amarilla y se preparen con gafas, mascarillas, escobas, fundas de basura y gorras para mitigar la caída de ceniza en su totalidad.

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Al momento no existen reportes ciudadanos evidenciando el descenso de este fenómeno en casas, calles o carros, pero con las capacitaciones entregadas por el gobierno seccional, las personas se encuentran preparadas para asistir en caso de emergencia.

La noche del martes 16 de mayo, el volcán Sangay emitió material piroclástico y lava que bajó por las paredes frontales, pero no llegó a topar a la comunidad, ya que la base de la montaña es amplia.

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El IG aseguró que estos actos son normales por la actividad eruptiva del volcán desde mayo del 2019. (I)