Las autoridades municipales se mantienen en el sector de la Pulida realizando trabajos de limpieza a causa del desbordamiento de la quebrada y la inundación que hubo allí. En la zona se encontró gran cantidad de basura que taponó los sumideros.

Paúl Calle, subgerente de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps), aseguró que en los muros de contención que cubren la quebrada encontraron capas gigantes de basura, que de no controlar a tiempo, el daño pudo haber sido peor.

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“Existía mucho material sólido acumulado, exactamente 43 metros cúbicos de basura. Las estructuras de captación lo controlaron, sino el problema era mucho mayor”, expresó.

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Los 56 uniformados entre Cuerpo de Bomberos, agentes de control y miembros de las entidades municipales, al realizar la limpieza de los sumideros, detectaron llantas, colchones, muebles viejos, botellas y gran cantidad de plástico que descendió junto con tierra y lodo.

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Gabriela Yángüez, administradora zonal Eugenio Espejo, contó que todos los desechos fueron llevados en seis volquetas. Remarcó que botar basura en la calle tiene consecuencias nefastas.

“Es importante mencionar sobre la corresponsabilidad ciudadana. Hemo visto mucha basura, a pesar de tener mantenimientos constantes”, sostuvo.

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La madrugada del domingo, 23 de abril, la quebrada del barrio la Pulida, en el norte de Quito, colapsó e inundó la zona urbana. Esto afectó a 22 familias, 20 viviendas y 76 personas que fueron rescatadas en el lugar. (I)