Con una inversión aproximada de 70.000 dólares, las autoridades municipales trabajaron en la obra civil, soterramiento de redes de conectividad, asfaltado y señalización horizontal y vertical de la calle Loja, en el centro de Quito.

Las obras fueron ejecutadas con apoyo de la Policía Metropolitana, Agencia Metropolitana de Control (AMC), Administración Zonal Manuela Sáenz, Agencia de Mercados, Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Emaps) y Emaseo. Los soldados azules participaron de las labores de limpieza con barrido manual e hidrolavado de las calles.

Además, los habitantes del sector participaron en la minga y fueron nombrados Guardianes del Patrimonio. A lo largo de la calle Loja, en el barrio San Roque, se plantaron árboles para embellecer el sector. Estos serán cuidados por los recién nombrados “padrinos de los árboles”, que son miembros de la misma comunidad.

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El Colectivo Neural Industrias Creativas aportó con la realización de murales en la calle del popular barrio. El objetivo, según el Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP), fue plasmar los rostros y acciones cotidianas del sector.

El IMP entregó reconocimientos al personal municipal por las labores realizadas. Fernando Pareja, coordinador de la Agencia Distrital del Comercio, fue nombrado Padrino de Honor de las obras ejecutadas en la calle que albergaba la feria de comerciantes.

Los trabajos en la calle Loja se iniciaron el 20 de febrero con la excavación para los pozos entre las calles Cumandá y Rumiñahui. También, se realizó excavación para la construcción de aceras, hoy terminadas, de las calles Tupac Yupanqui y Cantuña. (I)