Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel, de 50 años, se encontraba solo. Había sido abandonado por sus dos hombres de confianza, alias Machi y Chiva; se encontraba en un matorral, llevaba un día sin comer y casi no había tomado agua. Esa es la información oficial tras la captura del narcotraficante más famoso de Colombia.

Úsuga, alias Otoniel, es el mayor traficante de cocaína de Colombia y jefe del llamado “clan del Golfo”. Otoniel tiene diabetes, enfermedad que le afectó los riñones; de hecho, el colchón ortopédico que instaló en cada una de las cinco fincas donde rotaba sus noches de descanso se convirtió en una pieza fundamental para confirmar su presencia en un rancho ubicado en la vereda La Pita, en Turbo, Antioquia, de acuerdo a las investigaciones policiales que han sido publicadas en medios colombianos como El Tiempo.

De acuerdo con el investigador de la Policía, para detectar la ubicación de Otoniel fueron claves las actividades de inteligencia de la institución, que lograron establecer hace unas dos semanas movimientos de campesinos que llevaban “comida y provisiones hacia determinado punto”. Alimentos que debía consumir debido a su enfermedad.

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La hora cero de la operación Osiris

Fue las 5 de la mañana del viernes 22 de octubre. “Esta operación es histórica para la Fuerza Pública porque se articularon todas las Fuerzas y la Policía, unos 800 hombres y mujeres, 500 sobre el terreno. Además, estuvieron atentos y apoyando personal del Servicio Secreto de Inteligencia (MI6) del Reino Unido y la CIA e ICE de Estados Unidos”, aseguró una fuente reservada a diario El Tiempo.

En cada traslado, Otoniel llevaba sus dos perros, unos cazadores y dos caballos. “Los perros los había entrenado para que le advirtieran de cualquier persona o movimiento extraño. Ellos le advirtieron en muchas oportunidades de la presencia de la Fuerza Pública”, señaló uno de los investigadores de la Policía Nacional al frente del caso.

Los dos caballos, que tenía bien cuidados, eran sus armas vitales para huir de la zona cuando se alertaba de la presencia de las autoridades. La Policía lleva seis años con la operación Agamenón, en búsqueda de Otoniel; se han desarrollado varios golpes contra el clan del Golfo, en los que perdieron la vida 22 policías.

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El narcotraficante más peligroso de COlombia fue detenido en un punto llamado Cerro Yoki, en jurisdicción de Necoclí, municipio del departamento de Antioquia, donde estaba cercado desde hace meses.

El número uno de la banda criminal del clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga David (c), alias "Otoniel", a su llegada a Bogotá (Colombia) después de su captura. EFE/Policía Nacional de Colombia Foto: EFE

“Hay información que fue suministrada por miembros del clan del Golfo que sirvió para la captura”, aseguró el ministro de Defensa colombiano, Diego Molano, en declaraciones a medios desde la Brigada del Ejército Nacional en Carepa, Antioquia (noroeste).

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El viernes a las 5 de la mañana, en 22 helicópteros, fueron trasladados a la zona 500 uniformados, “se conformaron patrullas integradas por diez militares, un policía de Inteligencia y otro de Policía Judicial, encargados de barrer milimétricamente el lugar”.

Por primera vez se utilizó el helicóptero Halcón de la Policía Nacional en este tipo de operaciones, “que gracias a su cámara de calor ubicó a Otoniel y a sus dos hombres de confianza en determinado punto y empezó su persecución”, señaló la fuente.

Los uniformados ubicaron 57 puntos de movilidad del capo y los bloquearon, logrando su captura el sábado 23 de octubre sobre las tres de la tarde.

Su captura, según el presidente colombiano, Iván Duque, es “el golpe más duro que se le ha propinado al narcotráfico en este siglo en nuestro país y es solamente comparable con la caída de Pablo Escobar en los años noventa”.

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Solicitado en Estados Unidos

El director de la Policía Nacional de Colombia, el general Jorge Luis Vargas, aseguró este lunes que Úsuga “será extraditado a Estados Unidos”, aunque se desconocen los plazos o cuándo se producirá.

Este domingo el director de la Policía, general Jorge Luis Vargas, confirmó que se pagará recompensa por la captura de Úsuga David, quien será extraditado a Estados Unidos.

El ministro Molano aseguró que se pagará la recompensa que el Gobierno ofrecía por Otoniel de hasta 3.000 millones de pesos (casi 800.000 dólares) y que EE. UU. hará lo mismo con la suya, que ascendía a los 5 millones de dólares. (I)