El presunto autor de la bofetada que recibió el presidente francés Emmanuel Macron durante una visita en el sureste del país comparecerá el jueves de forma urgente ante un juez, indicó el miércoles la fiscalía de Valence (sureste).

Los guardaespaldas del presidente francés le detuvieron junto a un amigo y cómplice, que grabó la agresión.

El encausado, Damien T., de 28 años, “comparecerá durante la mañana ante la fiscalía, para su juicio por procedimiento urgente en la tarde (del jueves)”, explicó en su comunicado el fiscal Alex Perrin.

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Su camarada Arthur C. “recibirá una convocatoria de comparecencia para finales del segundo semestre de 2022 para que responda de las infracciones relacionadas con posesión ilegal de armas” que fueron halladas en su domicilio, precisó el magistrado.

Ambos siguen detenidos provisionalmente, acusados de “violencia contra persona que ostenta autoridad pública”, y esa situación jurídica fue prolongada “para seguir con las verificaciones”. Damien T. se enfrenta a hasta tres años de cárcel y 45.000 euros (unos 50 mil dólares) de multa.

Sin indicios anteriores

Ninguno de los dos jóvenes tienen antecedentes policiales ni tampoco habían sido detectados por los servicios de inteligencia, precisó el texto. Pertenecen a asociaciones locales “vinculadas con las artes marciales, la Edad Media, el universo mangas (cómics japoneses)”, dijo el fiscal, citado en el comunicado.

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Durante su interrogatorio, Damien T., que no tiene trabajo, reconoció “haberle dado un golpe al jefe de Estado y haber pronunciado palabras que denunciaban su política”.

El incidente se produjo el martes en la localidad de Tain-l’Hermitage (sureste), cuando Macron se acercó a un grupo de personas, durante una visita presidencial.

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El joven se declaró cercano al “movimiento de los chalecos amarillos”, que se manifestó durante muchos meses, en todo el país, contra la política del gobierno de Macron hasta poco antes del inicio de la pandemia del coronavirus.

El ahora detenido se declaró afín a la ideología “de derecha o extrema derecha”, aunque “sin pertenecer a ningún partido”, y afirmó que había actuado “sin reflexionar, para expresar su descontento”, explicó Perrin.

En cuanto a Arthur C., soltero y con un trabajo precario, durante el registro de su domicilio se hallaron además libros de carácter militar, un ejemplar del “Mein Kampf” (Mi lucha) de Adolf Hitler y una bandera con la hoz y el martillo comunistas, entre otros artilugios. (I)