Como para no creer: una familia que pudo salvarse del potente terremoto de Siria, del pasado lunes 6 de febrero, murió en un incendio desatado en la residencia en la que fue albergada en medio de la desolación de comunidades enteras arrasadas por el seísmo.

La tragedia se registró la madrugada del viernes 17 de febrero y los fallecidos son siete. Todos miembros del mismo núcleo familiar.

Las víctimas se habían trasladado a la región central de Konya desde la ciudad de Nurdagi, en el sureste de Turquía, que resultó gravemente afectada por el terremoto, confirmó la agencia AFP.

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Tras 260 horas del terremoto de Turquía, niño de 12 años fue rescatado con vida entre los escombros

Una niña es la sobreviviente del incendio de la familia siria

El fuego apagó la vida de cinco niños sirios y sus progenitores cuando la fatalidad tocó la casa en la que vivían en Turquía y a la que llegaron la semana pasada, informaron medios locales.

Los cinco niños tenían entre 4 y 13 años. Residentes de la zona indicaron que una menor fue rescatada del incendio. Trataron de ayudar más, pero las llamas lo impidieron.

No pudimos intervenir, expresaron consternados los vecinos.

A la pequeña la pudieron rescatar por una ventana, declaró un morador a la agencia turca Anadolu Muhsin Cakir.

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La inseguridad rodea a Aya, la niña rescatada de los escombros del terremoto y unida a su madre por el cordón umbilical: ¿por qué han intentado secuestrarla tres veces?

Terremoto con balance trágico

En Turquía viven casi cuatro millones de sirios. Muchos de ellos residen en regiones del sureste, devastadas por el terremoto, señala AFP.

Pasados 11 largos días de la tragedia sísmica, el balance del terremoto del 6 de febrero en Turquía y Siria supera en la actualidad, las 41 mil muertes.

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Pese a que rescatistas se sorprenden, al igual que el mundo entero, al hallar personas vivas bajo los escombros, para el mediodía del viernes pasado la esperanza de encontrar sobrevivientes se había desvanecido ampliamente.

La crisis humanitaria que ya se percibe en ambos países llevó a Naciones Unidas a solicitar 1.000 millones de dólares para afrontarla.

“Las necesidades son enormes, la gente está sufriendo y no hay tiempo que perder”, manifestó el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en un comunicado, donde solicitó fondos para socorrer a las víctimas.

Indicó que las contribuciones darían alivio por tres meses a 5,2 millones de personas. (I)

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