La petrolera anglo-neerlandesa Shell dejará de comprar gas y petróleo de Rusia y cerrará sus gasolineras en ese país, según anunció este martes en un comunicado, en el que también presentó sus “disculpas” por haber adquirido hidrocarburos rusos tras la invasión de Ucrania.

“Shell anuncia su intención de retirarse de su implicación en todos los hidrocarburos rusos, incluidos el crudo, los productos derivados del petróleo, el gas y el gas natural licuado, de manera gradual, alineado con las pautas del Gobierno (británico)”, señaló la empresa.

Como primera medida “inmediata”, Shell interrumpirá la compra al contado de crudo y cerrará todas sus estaciones de servicio y sus operaciones con combustibles de aviación y lubricantes en Rusia.